CIUDAD DE MÉXICO (EL UNIVERSAL).- Para la ocasión, la celebridad Kris Jenner deslumbró con un vestido rojo intenso con escote strapless, que destacó por su dramatismo y sofisticación. La prenda combina un tejido brillante con una estructura entallada y falda con olanes, que aportan movimiento y fuerza al look.
El color rojo -símbolo de poder, amor y celebración- fue el acento perfecto para una noche que marcó siete décadas de una de las mujeres más influyentes de la cultura pop. Kris completó su look con guantes largos negros y un brazalete Bulgari.
El vestido de Jenner es un diseño vintage de Givenchy Haute Couture diseñado por Alexander McQueen para la colección otoño-invierno 2002.
Con su característico corte de cabello y maquillaje impecable, Kris reafirmó su estatus de ícono de estilo.
La fiesta, ambientada como una auténtica película de James Bond, incluyó autos clásicos, luces doradas, bartenders con esmoquin y una orquesta en vivo. Cada detalle reflejaba la esencia de Kris: sofisticación, humor y una impecable atención al detalle.
Sus hijas compartieron en redes sociales distintos momentos del festejo, mostrando el ambiente festivo y la decoración que transportaba a los asistentes al universo del famoso espía británico. En Instagram, Kim Kardashian publicó una emotiva felicitación: "Feliz cumpleaños a la mamá más hermosa del planeta. No hay nadie más especial en este mundo que tú2.
A sus 70 años, Kris Jenner no solo sigue siendo el centro del clan Kardashian-Jenner, sino también una figura clave en la industria del entretenimiento. Su fiesta no solo fue un homenaje a su vida personal, sino una declaración de que el estilo, la elegancia y la reinvención no tienen fecha de caducidad.