La noche de los Óscar es de cambios de vestuario, especialmente para las damas, como ha sido el caso de Lady Gaga, que optó por un vestido negro con transparencias para su paso en la alfombra champagne que, momentos después, cambió para interpretar la canción por la que estaba nominada. Casi en el último minuto, confirmó que iba a actuar en la gala de los Óscar para interpretar la canción por la que estaba nominada “Hold My Hand”, de la película “Top Gun: Maverick”. Para ese momento, la cantante se despojó de su intenso maquillaje y labios rojos y de su glamuroso vestuario y eligió una sencilla camiseta negra, unos pantalones vaqueros cortados por las rodillas y unas simples deportivas para cantar, una sorpresa, ya que ella no acostumbra a llevar en público un vestuario tan informal.