Lo que sería el reencuentro entre el cantante Morrisey y su público mexicano, terminó en un fin de semana lleno de enojo, desilusión y fuertes reclamos.
El cantante británico había prometido presentarse en el Palacio de los deportes de la CDMX; sin embargo, a unas cuantas horas de que saliera al escenario, Ocesa anunció lo que muchos ya sospechaban: el concierto se cancelaba.
“Informamos al público de la Ciudad de México y Guadalajara que, debido al agotamiento extremo del artista, los conciertos programados para el 31 de octubre en el Palacio de los Deportes y el 4 de noviembre en el Auditorio Telmex no se llevarán a cabo”, publicó la promotora en sus redes sociales.
Para los fans, esta última cancelación (la cuarta en una década) fue la gota que derramó el vaso, por lo que lo acusaron de ser poco profesional y hasta le han exigido que deje de promocionar su música en nuestro país:
“Tu actitud hacia los mexicanos es muy triste. Ya no debes anunciar nada, al menos no en México, ni siquiera vender tus cosas aquí”, “Esta es la tercera vez que cancelas con la misma excusa. El talento no excusa la falta de respeto”, “Si no te gusta tocar en México, entonces olvídatelo”, son algunos de los mensajes que le han hecho llegar a través de su cuenta oficial de Instagram.
Algunos fans fueron más duros y no sólo lo acusaron de racismo. “Ya no eres bienvenido en México”, “México no olvida, solo espera”, o es forzoso que pongas al país en tu lista de gira”, “Más que cansancio ya suena a racismo. Se tenía que decir”, “Amigo, admite que odias México, es mejor que fingir”.