Una de las claves para una relación sana y duradera es la comunicación. Aunque muchas veces se tenga dominada esa parte, al pasar cierto tiempo la pareja atraviesa por diversas etapas y es vital detectar algunas de las señales de alarma que indican que deben terminar.
Los patrones de conducta que mencionamos a continuación, para ser considerados dentro de estas señales, deben ser comportamientos que sean una constante en situaciones determinantes para indicar el deterioro de la relación.
La psicóloga Ellie Lisitsa, exmiembro de la Universidad de Gottman, desarrolló esta teoría que indica que la identificación temprana de estos patrones negativos en la conducta es muy importante para realizar una intervención efectiva y tener una mejor estrategia de comunicación.
¿Cuáles son las 4 señales de alarma en una relación?
Según un estudio realizado en Gottman Relationship Adviser, las señales que advierten el fin de las relaciones son las siguientes:
-Crítica
-Desprecio
-Defensividad
-Obstrucción
La crítica, más allá de que sea constructiva, aparece para evidenciar o juzgar el comportamiento o las acciones de la otra persona de manera directa y sin ningún tipo de filtro.
Por su parte, el desprecio es un comportamiento evidente donde una de las partes involucradas es víctima de múltiples faltas de respeto, ridiculización o sarcasmo. Está comprobado que este comportamiento nocivo en específico es la causa de muchos divorcios.
Mostrar defensividad, también resulta ser uno de los indicadores para saber que una relación va mal, esto se puede detectar cuando la pareja en lugar de asumir su responsabilidad en determinadas situaciones pone excusas o asume un papel de víctima.
La obstrucción es un mecanismo de defensa que implica retirarse o evadir los temas de conflicto para no enfrentar los problemas, este comportamiento evita que se encuentre una solución a cualquier problemática que se presente
Fortalecer la relación con comunicación efectiva y entendimiento por la manera en que percibe la otra persona los conflictos, resultan ser vitales para que se pueda actuar de forma constructiva en caso de que aparezca alguna de estas señales dentro de la relación.