Ciudad de México. - La actriz Isela Vega, emblema del cine mexicano, murió a los 81 años dejando tras de sí una gran estela de trabajos y una inteligencia, belleza y carácter arrolladores que marcaron más de 60 años de prolífica carrera.
“Mujer trasgresora de nuestro cine; actriz, guionista, productora y directora de historias poderosas. Te despedimos con tristeza, con gran admiración y cariño, Isela Vega. Sigue con nosotros la enorme fuerza que siempre les diste a nuestras pantallas”, informó la el Instituto Mexicano de Cinematografía de México.
La actriz, que padecía cáncer, acreedora de cinco premios Ariel. Entre ellos, uno por su amplia trayectoria; otro a mejor actriz por “La viuda negra” (1977), del director Arturo Ripstein; y por “La ley de Herodes” (2000) a mejor coactuación femenina.
Nacida en Cuauti, Sonora, el 5 de noviembre de 1939, se convirtió en la Princesa del Carnaval de Hermosillo con 18 años. Ahí arrancó su carrera de modelo y se fue a estudiar inglés a Estados Unidos.
Su carrera comenzó como cantante en hoteles y bares de México y como modelo participó en el programa “Max Factor Hollywood” (1959). Pero cambió de rumbo tras prepararse como actriz y su primera oportunidad en el cine fue en “Verano violento” (1960).
A partir de entonces fue parte de películas, pero no fue hasta siete años después que logró su primer protagónico junto con Mauricio Garcés en “Don Juan 67” (1967). En 1973, participó en “Con furia en la sangre”, abriéndose puertas en el extranjero.
Su imagen de símbolo sexual fue alimentada por cintas atrevidas en las que participó, entre ellas “SOS Conspiración Bikini” (1967), “El deseo llega de noche” (1969), entre otras.
Su belleza la llevó a convertirse en un ícono sexual en México e incluso a convertirse en la primera mujer latina en aparecer en la revista estadounidense Playboy.
En su prolongada carrera también tuvo tiempo de escribir, producir y dirigir.
En 1980 debutó como productora de “Dulces navajas” del director español Eloy de la Iglesia, en donde también formó parte del elenco como actriz.
Fungió como productora, escritora y actriz de la película “Amor a navaja libre” dirigida por Rafael Potrillo. Cuatro años más tarde, se convertiría por primera vez en directora de “Los amantes del señor de la noche” (1986).
Su largo camino en la industria del espectáculo también incluye el teatro
y televisión.
Le sobreviven dos hijos, Alberto Vázquez Vega, de su relación con Alberto Vázquez y Shula Vega, de su romance con Jorge Luke.
Su cuerpo fue velado en una funeraria de la colonia San Rafael, donde hoy será cremado.