CIUDAD DE MÉXICO, junio 23 (EL UNIVERSAL).- Para muchos perros, los fuegos artificiales pueden ser una fuente de gran estrés y ansiedad. Con su oído extremadamente sensible, el ruido explosivo y las luces brillantes pueden ser aterradores. Sin embargo, hay varias estrategias que pueden ayudar a tu mascota a manejar este miedo.
¿Por qué los perros tienen miedo a los cohetes?
La respuesta radica en la sensibilidad auditiva de los perros. Mercè Garcia, Adiestradora canina especializada en Modificación de Conducta, asegura que ellos perciben los sonidos hasta tres veces más fuerte que nosotros, lo que hace que los ruidos de los cohetes sean mucho más intensos para ellos. Además, el ruido repentino e inesperado, junto con las luces brillantes, agravan su miedo. Este miedo puede manifestarse en temblores, salivación excesiva, vómitos, diarrea, nerviosismo y comportamientos anómalos. El miedo a los fuegos artificiales puede deberse a varias razones:
Genética: Algunos perros heredan el comportamiento miedoso de sus progenitores.
Traumas: Experiencias negativas previas pueden causar un miedo persistente.
Socialización: La falta de habituación a ruidos fuertes durante las primeras etapas de vida puede provocar una respuesta negativa cuando el perro escucha fuegos artificiales por primera vez.
Estrategias para calmar a tu perro
No dejarlo solo: Es recomendable no dejar a un perro solo en casa si tiene mucho miedo y muestra conductas destructivas. Estar a su lado le ayudará a sentirse más seguro.
Crear un refugio seguro: Proporciona un lugar seguro y tranquilo donde tu perro pueda refugiarse durante los fuegos artificiales. Una habitación interior sin ventanas es ideal. Llena el espacio con objetos familiares y reconfortantes, como su cama, juguetes y una prenda de ropa con tu olor.
Aislarlo del ruido: Cierra las ventanas durante los fuegos artificiales y pon música relajante a un volumen alto para enmascarar el ruido. También puedes usar orejeras para perros, pero asegúrate de que tu perro las acepte sin obligarlo.
Ofrecer distracciones: Dale un hueso crudo, un juguete expendedor de comida o su peluche favorito para mantenerlo ocupado.
Usar Feromonas: Las feromonas sintéticas, como las de Adaptil, imitan las glándulas sebáceas de las perras durante la lactancia y ayudan a bajar los niveles de ansiedad.
Desensibilización: La desensibilización implica exponer gradualmente a tu perro a sonidos de fuegos artificiales a un volumen bajo y aumentar el volumen de forma gradual con el tiempo. Complementa este proceso con contra condicionamiento, ofreciendo recompensas como golosinas o juguetes cada vez que escuche el ruido. Con paciencia y tiempo, tu perro puede asociar los fuegos artificiales con experiencias positivas.
Medicación: En situaciones graves, consulta a tu veterinario sobre el uso de ansiolíticos u otro tipo de medicación. Evita fármacos con acepromacina, ya que aumentan el estado de consciencia del perro, pero le impiden moverse, lo que puede provocar estrés y pánico.
Ayudar a tu perro a superar el miedo a los fuegos artificiales requiere paciencia, comprensión y una estrategia bien planificada. Al implementar estas tácticas y mantener una actitud calmada y positiva, puedes hacer una gran diferencia en la manera en que tu perro maneja estos momentos estresantes.