Beneficios de una alimentación saludable y la actividad física para la función eréctil

¿Sabías que un 23,4% de los hombres mexicanos mayores de 40 años sufren algún tipo de disfunción eréctil? Estos datos, procedentes de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2020, pone de manifiesto la incidencia de esta incapacidad de lograr y mantener una erección para tener relaciones sexuales satisfactorias.

Un impacto alto pero que, sin embargo, tiene solución en la mayoría de los casos. Y mucho más sencilla de lo que los hombres suelen pensar. Lejos de caer en la vergüenza y en la pérdida del apetito sexual, existen opciones para que este tipo de disfunción no sea una muerte para la vida sexual.

Entre las prácticas más comunes, y sencillas, que ayudan a mejorar esta patología están la alimentación saludable y la actividad física regular. Estos dos hábitos pueden convertirse en los aliados perfectos para combatir la disfunción eréctil. A continuación vamos a ver cómo pueden ayudar y qué pasos concretos hay que seguir, aunque si quieres ampliar la información puedes ver más detalles aquí.

Nutrición para el placer

La alimentación juega un papel fundamental en la salud sexual. De hecho, juega en la salud en general. "Somos lo que comemos", dice la tradición popular. Y es que los alimentos que consumimos pueden ayudarnos, sin enterarnos, a mejorar la circulación sanguínea, fortalecer el sistema cardiovascular y aumentar la testosterona, la hormona masculina por excelencia. Para conseguir mejorar nuestra vida sexual con la nutrición y alimentación hay que incrementar la ingesta de determinadas vitaminas.

La vitamina A, presente en frutas y verduras como las zanahorias, el tomate y las espinacas, es vital para la producción de espermatozoides. Las del grupo B, que se encuentran en cereales integrales, legumbres y frutos secos, están presentes en la producción de hormonas sexuales.

La vitamina C, un poderoso antioxidante que abunda en cítricos, pimientos y fresas, protege los vasos sanguíneos y mejora la circulación. Y la vitamina E, presente en frutos secos, semillas y aceites vegetales, ayuda a combatir el estrés oxidativo y a mejorar la función eréctil.

Desde el punto de vista de los minerales, el consumo de zinc también es importante para mejorar la testosterona y la calidad del esperma. Presente en legumbres y carne roja, es un magnífico compañero de viaje a la hora de combatir la disfunción eréctil. Lo mismo ocurre con el magnesio, que ayuda a relajar los músculos de la próstata.

Si es importante tomar alimentos saludables también es evitar algunos que no van a jugar a favor de nuestra salud. ¿Cuáles son estos? Aquellos que contienen elevadas cantidades de grasas saturadas y azúcares refinados. Y, sobre todo, hay que sacar de nuestra día con la mayor celeridad posible los alimentos procesados.

¿Qué pasa si no lo hacemos y consumimos este tipo de comida? Aumento de peso y colesterol alto, factores que afectan la salud cardiovascular y la función eréctil. Algo que empeora si tenemos una vida sedentaria. Ahora vamos a dar información adicional sobre la importancia del ejercicio para prevenir y luchar contra la disfunción eréctil.

El ejercicio que enciende tu pasión

Hacer ejercicio de forma regular no solo ayuda a mantener un peso saludable y a fortalecer el corazón, sino que también mejora la vida sexual. Los de tipo aeróbico, como caminar, correr o nadar, mejoran la circulación sanguínea y fortalecen los músculos del pene.

Los ejercicios de fuerza, como levantar pesas o usar bandas de resistencia, también pueden ser beneficiosos, ya que aumentan la producción de testosterona y la masa muscular. Además, hay ejercicios más específicos, como los que se realizan en la zona del suelo pélvico, que mejoran el rendimiento sexual y, en combinación con otros, previenen la disfunción eréctil.

Estos ejercicios, realizados de forma constante, junto con una dieta equilibrada forman los pilares de la estrategia más eficaz contra la disfunción eréctil, mejorando la salud cardiovascular y promoviendo un peso saludable.

Con el asesoramiento de un profesional de la salud será incluso más fácil superar el reto que supone para los mexicanos enfrentarse al problema de la disfunción eréctil. Como hemos visto, son prácticas sencillas: comer bien y hacer ejercicio. Sin embargo, llevarlas a la práctica puede ser más complicado. De ahí la importancia de comprometerse con uno mismo.

Para aumentar las probabilidades de éxito, y en definitiva para mejorar la salud en general, también es necesario dejar los vicios que solo lastran nuestro estado físico. El tabaco daña los vasos sanguíneos y reduce el flujo sanguíneo, mientras que el alcohol puede afectar tanto la función eréctil como la libido.

La disfunción eréctil puede impactar, de hecho lo hace, en la autoestima, la calidad de vida y las relaciones personales de los hombres. Aumenta el estrés y la ansiedad, creando un círculo vicioso difícil de romper que cronifica el problema.

Pero, como hemos visto, no es inevitable y se puede superar. Con un estilo de vida saludable y activo, y asesoramiento profesional, estate seguro de que conseguirás una vida sexual plena y satisfactoria.