CIUDAD DE MÉXICO, junio 30 (EL UNIVERSAL).- La complejidad de la salud de las personas es tal que muchas veces se pueden encontrar sensaciones en el cuerpo que pueden ser tomadas como algo común en algunos casos, mientras que en otros se trata de un síntoma de algo más. Por eso resulta importante conocer bien nuestro cuerpo y prestar atención a cualquier cambio que podamos sufrir.
Así es como llegamos a los escalofríos, una sensación de frío que, por lo general, las personas perciben luego de exponerse a un ambiente con bajas temperaturas, según señala la National Geographic. En otros casos, los escalofríos pueden tratarse de temblores acompañados sensación de frío y palidez, según explica la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Atención con los escalofríos
A estos datos se puede anexar que los escalofríos pueden aparecer como una señal de inicio de una infección, por ello se los relaciona primeramente con la fiebre. De todos modos, existe la posibilidad de que aparezcan sin necesidad de que el cuerpo aumente su temperatura, por lo que una vez más llegamos al punto de lo compleja que es la salud humana.
En cuanto a cómo se lo explica desde el lado de la ciencia, los escalofríos son una creación del sistema nervioso de las personas. Esto se debe a que funcionan como una respuesta automática ante situaciones de frío, estrés o miedo, y es el cerebro el encargado de enviar señales al cuerpo ante una posible amenaza o si se está produciendo un cambio de temperatura.
Entre algunas causas de esta sensación aparece la exposición al frío, efectos secundarios de un medicamento, consecuencia de una actividad física extrema, hipotiroidismo, hipoglucemia y desnutrición. En este punto, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos alerta a las personas a estar atentas ante la ocurrencia de escalofríos. Principalmente, hace referencia a 5 casos en los que se debería consultar a un médico ante los escalofríos y te los detallamos a continuación.
Cuando el escalofrío es acompañado por confusión, rigidez en el cuello, lentitud o irritabilidad.
Cuando también hay dificultad respiratoria, tos fuerte, ardor o dolor abdominal.
Si hay fiebre y esta no baja luego de 3 días o ha durado más de 5.
Cuando los escalofríos están acompañados de hipotermia o congelamiento.
Cuando quien tiene escalofríos presenta otras condiciones como hipotiroidismo o tiene síntomas compatibles con hipoglucemia.