CIUDAD DE MÉXICO, julio 9 (EL UNIVERSAL).- Los cereales suelen ocupar un lugar destacado en la salud por sus múltiples beneficios nutricionales. Sin embargo, existe un alimento que, aunque parece un cereal y comparte muchas de sus propiedades, en realidad es una semilla con beneficios excepcionales para la salud. Estamos hablando del amaranto, un pseudocereal perteneciente al género Amaranthus, que ha sido cultivado durante miles de años, especialmente en América Latina.
Según la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de México, el amaranto es conocido por su impresionante perfil nutricional. Rico en proteínas, fibra, vitaminas (como la vitamina E y varias del complejo B), y minerales (como calcio, magnesio, fósforo y hierro), este pseudocereal destaca por contener todos los aminoácidos esenciales, incluidos niveles significativos de lisina, un aminoácido que suele ser deficiente en otros cereales. Además, su versatilidad en la cocina es notable: puede ser utilizado en sopas, ensaladas, panes, postres e incluso puede tostarse y reventar como palomitas de maíz.
Uno de los beneficios más notables del amaranto es su capacidad para ayudar a prevenir la osteoporosis, una enfermedad que afecta principalmente a las mujeres a medida que envejecen. Esta condición se caracteriza por una disminución en la densidad ósea, aumentando el riesgo de fracturas. El amaranto combate esta enfermedad gracias a su alto contenido de nutrientes esenciales.
Primero, el amaranto es una excelente fuente de calcio, un mineral vital para mantener y fortalecer los huesos. Una porción de amaranto cocido aporta una cantidad significativa de calcio, esencial para prevenir la pérdida de densidad ósea. En segundo lugar, el magnesio presente en el amaranto es crucial para la absorción y el metabolismo del calcio, ayudando a mantener los huesos fuertes y sólidos. Además, el hierro contenido en el amaranto es vital para evitar la anemia, que puede influir indirectamente en la salud ósea.
Además de su impacto positivo en la salud ósea, el amaranto ofrece otros beneficios importantes. Las proteínas de alta calidad que contiene, incluyendo aminoácidos esenciales como la lisina, son fundamentales para la formación de colágeno, necesario para mantener la estructura ósea. La fibra presente en el amaranto contribuye a una buena digestión y a la absorción de nutrientes esenciales para la salud ósea.
El amaranto también es rico en proteínas, lo que promueve el incremento de la masa muscular. Su elevado contenido de fibra dietética mejora la salud digestiva y previene el estreñimiento. Al ser bajo en calorías y brindar una sensación de saciedad, su consumo puede favorecer la pérdida de peso. Además, proporciona vitaminas y minerales que refuerzan el sistema inmune y ayudan a prevenir enfermedades.
Otro beneficio destacado del amaranto es su capacidad para brindar una dosis extra de energía y resistencia, lo cual es especialmente beneficioso para personas que realizan actividad física. Gracias a su contenido de antioxidantes, el amaranto ayuda a prevenir enfermedades y a proteger el cuerpo del estrés oxidativo.