Factores de riesgo y prevención de la demencia temprana

Hábitos saludables para prevenir demencia temprana

CIUDAD DE MÉXICO, octubre 3 (EL UNIVERSAL).- Para la salud del cerebro, las acciones cotidianas positivas pueden hacer una diferencia, hasta bajar el riesgo de deterioro cognitivo y posiblemente el Alzheimer y la demencia, remarca la Asociación Internacional de Alzheimer.

Sus expertos hacen referencia a la incorporación de hábitos en nuestra vida que pueden ayudar a mantener un cerebro saludable.

En este punto es que la demencia es uno de los padecimientos que el cerebro humano puede tener y, según la Organización Mundial de la Salud, es la séptima causa de defunción y una de las causas principales de discapacidad y dependencia entre las personas de edad en el mundo entero. Además, aclara que la demencia es un término que engloba varias enfermedades que afectan a la memoria, el pensamiento y la capacidad para realizar actividades cotidianas.

La Fundación Pasqual Maragall (España) advierte que acceder a un diagnóstico de demencia cuando aparecen los primeros síntomas no siempre resulta un camino sencillo. Por este motivo, explica, una parte importante de las personas no pueden beneficiarse de tratamientos ni de asistencia especializada, especialmente en la fase de deterioro cognitivo leve, cuando es esperable la mayor eficacia el beneficio para la salud cerebral.

La demencia por lo regular ocurre a una edad avanzada y la mayoría de sus tipos es poco frecuente en personas menores de 60 años, de acuerdo a un informe de los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos. En este punto, enumera entra las causas de la demencia: enfermedad de Huntington, lesión cerebral, enfermedad de Pick, esclerosis múltiple, infecciones como el VIH/sida, la sífilis y la enfermedad de Lyme, mal de Parkinson, parálisis supranuclear progresiva, consumo excesivo de alcohol y trauma cerebral.

En este marco, es importante destacar que existen casos en que se produce una demencia temprana, al igual que el Alzhéimer de inicio precoz. Los investigadores intentan determinar las causas concretas de estas afecciones en el cerebro y es por eso que la Universidad de Exeter (Reino Unido) llevó a cabo un estudio en el que pudo revelar los factores de riesgo de padecer una demencia temprana.

Según detalla el estudio, los factores que más se relacionaron al desarrollo de la demencia temprana fueron, en primer lugar, los genéticos, y en segundo lugar los malos hábitos a lo largo de la vida de las personas. Este último punto puede corregirse y es una noticia positiva porque alienta a las personas a proteger la salud de su cerebro.

Diabetes

Déficit de vitamina D.

Consumo excesivo de alcohol.

Estrés crónico.

Soledad.

Depresión.

Accidentes cerebrocardiovasculares.

Niveles altos de proteína C.

Educación y reflexión: Fomentar una cultura que valore a las personas más allá de su apariencia.

Priorizar el bienestar personal: Resistir la presión de los cánones estéticos y enfocarse en la salud mental y física.

Eliminar la culpa: Deshacerse de la mentalidad de alimentos "prohibidos" y disfrutar de la comida sin juicios.

Fomentar el amor propio: Aceptar el cuerpo como es, valorando lo que hace por nosotros cada día.

Cuestionar los mensajes de las redes sociales: Reflexionar sobre cómo los medios influyen en la percepción del cuerpo.

Ser amables con nosotras mismas: Hablar con gratitud y compasión hacia nuestro cuerpo.

Para concluir, la psicóloga Mia Hungría, sugiere especialmente a las mujeres, dejar de utilizar frases que refuercen la delgadez como ideal, como "has adelgazado, te ves bien" y optar por elogios que valoren cualidades más profundas, ya que es crucial que la sociedad avance hacia un modelo de belleza más inclusivo y realista, que celebre las diferentes formas y tamaños del cuerpo humano y que fomente una relación más saludable con la alimentación y la imagen corporal.