Uso excesivo de videojuegos y aparatos electrónicos cambia conducta en niños

Ciudad de México, 29 abr (EFE).- El uso excesivo de videojuegos y dispositivos electrónicos modifica la conducta de niñas y niños, además de elevar el riesgo a desarrollar depresión y ansiedad, afirmó este sábado una especialista.

A propósito del Día del Niño y la Niña que conmemora este 30 de abril, Rocío Nuricumbo Ramírez, psicoterapeuta infantil, explicó en un comunicado que muchos infantes actualmente llegan a terapia por problemas como no levantarse temprano, pegar a sus compañeros, no hacer las tareas o no prestar atención en clase.

"Pero a partir de la pandemia hemos observado un cambio en los motivos de consulta, pues además de los mencionados, los niños se aíslan, ´se cortan´, no están logrando gestionar de manera adecuada sus emociones, tienen una falta de integración social y pasan mucho tiempo en su recámara o jugando con dispositivos electrónicos", abundó.

La también profesora de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) precisó que a partir de 2004 hubo un cambio drástico en las forma de socializar de los infantes, pues mientras antes se jugaba en las calles y parques, actualmente los niños juegan encerrados en sus casas y de manera individual o remota.

"Algunos padres y madres de familia intentan una mayor socialización y los inscriben en actividades extraescolares, como algún deporte o taller artístico, pero esas son actividades estructuradas, muy distintas a salir libremente a jugar a la calle con otros niños", recalcó.

Este aislamiento, argumentó, se ha vuelto más significativo en la era de los videojuegos y dispositivos electrónicos.

"Una modalidad de socialización es que a veces se conectan con sus propios compañeros en línea y hacen juegos virtuales, pero el riesgo es que a veces no hay una supervisión adecuada de los padres y madres acerca de con quién interactúan, qué temas ven en pantalla y cuántas horas pasan con los dispositivos electrónicos", refirió.

Lo deseable para la psicoterapeuta es combinar estas ocupaciones con otras que sean físicas y procuren mayor socialización real con más menores.

La experta recomendó a los menores disfrutar esa etapa de su vida, que no traten de adelantarse a ser adultos y busquen ser atendidos y escuchados por sus padres, maestros y pares.

En el caso de los padres y madres, no dejarse rebasar por el fenómeno de las redes sociales y los dispositivos electrónicos, además de responsabilizarse para tener más información sobre las nuevas formas de información y comunicación.