PIRENÓPOLIS, Brasil (AP) — La población de la ciudad brasileña de Pirenópolis salió a las calles el domingo en una procesión del tradicional festival de las Cavalhadas.
La tradición comenzó en el siglo XIX, iniciada por un sacerdote portugués que quería celebrar al Espíritu Santo y a la vez conmemorar la victoria de los caballeros ibéricos cristianos sobre los moros.
La procesión del Emperador del Espíritu Santo Divino empezó en la mañana temprano en Pirenópolis, una ciudad de 25.000 habitantes ubicada a 150 kilómetros (93 millas) al oeste de Brasilia, la capital del país sudamericano. Otras ciudades del interior también celebran el festival de las Cavalhadas.
Las festividades incluyen una escenificación al aire libre de una batalla entre guerreros cristianos y musulmanes. Al final, los moros derrotados son convertidos al catolicismo.