BRUSELAS, Bélgica (EFE).- La etiqueta "Ramadán friendly" que una veintena de centros culturales y teatros en Bruselas utilizan para advertir a los miembros de la audiencia musulmanes de algún desnudo, de escenas de violencia o de música, está recibiendo críticas de algunos políticos belgas y de la comunidad musulmana.
Las etiquetas tienen como objetivo hacer que las representaciones en los centros culturales de Bruselas como KVS, Kaaitheater y Beursschouwburg sean más accesibles para los musulmanes durante la festividad islámica, que incluye el ayuno.
El primer ministro flamenco y ministro de Cultura, Jan Jambon (N-VA), dijo que no apoya ese tipo de avisos.
"Tal interferencia religiosa en la práctica cultural-artística me parece muy problemática", escribió en una carta a los centros culturales de Bruselas, informó el diario flamenco Gazet van Antwerpen.
Michael De Cock, director artístico del KVS, discrepa del político belga, recoge la agencia Belga.
"El KVS es un teatro urbano inclusivo y tiene como objetivo asegurarse de que todos, incluidos los musulmanes, se sientan bienvenidos", señaló De Cock, informa el mismo diario.
Sin embargo, la iniciativa tampoco ha sido bien recibida por los musulmanes.
"Ningún musulmán ha pedido esto", señaló por su parte Zeynep Balci, portavoz del ministro-presidente de la región de Bruselas, Rudi Vervoort (PS).
"El hecho de que los musulmanes necesiten advertencias de contenido para una representación teatral es completamente innecesario", dijo por su parte Youssef Kobo, director de A Seat at the Table, una organización que pone en contacto a jóvenes desfavorecidos con la comunidad empresarial.
"Las etiquetas crean la imagen del musulmán no mundano. Esta iniciativa es paternalista y condescendiente", añadió.