LA HAYA. - Algunos son diseños casi imposibles de vestir, otros estarían en la lista de deseos de cualquier admiradora de Dior, pero los conjuntos refinados y elegantes que posan en las salas del Kunstmuseum de La Haya desde este sábado son un espectáculo artístico de moda imprescindible que homenajea la evolución histórica y feminista de esta casa de diseño.
Fue el 12 de febrero de 1947, en un París aún traumatizado por los horrores de la Segunda Guerra Mundial y en plena escasez textil, cuando el diseñador francés Christian Dior, un genio de los negocios que quería ser arquitecto, presentó su primera colección de moda.
Apostó por un estilo femenino elegante, impresionante y apetecible, pero nada austero, poco práctico, de cintura esbelta, siluetas imposibles y precios inalcanzables para los bolsillos de la posguerra.
“Utilizaba metros y metros de seda en un momento como ese. Tenía una capacidad increíble para vender porque cada vestido costaba al menos el sueldo de un año de una persona”, explica a EFE Cesar Rodríguez Salinas, conservador y restaurador de tejidos y moda histórica del Kunstmuseum.
Las faldas amplias de Dior, que transformaron la moda, destacan entre los diseños expuestos en la exposición “Dior, New Look”, que abrió ayer en La Haya.
El éxito de la marca ha sido imparable desde entonces, incluso después de la muerte de Dior en 1957 a los 52 años.
Con o sin él, Dior ha presentado líneas refinadas cada temporada y ha arrastrado con él a la industria textil francesa, a París y a toda la alta costura, llevándolos a la cima de la moda de calidad.
Abrió sucursales en Nueva York y Londres, y muchos han imitado o se han inspirado en sus modelos, con su beneplácito, pasando a definir los estilos del momento, y de la actualidad.
El hilo conductor de esta exposición de más de 110 prendas es el diálogo entre la obra del fundador Christian Dior, y la de Maria Grazia Chiuri, ambos reflejando el espíritu de su época. La exposición estará disponible hasta el 26 de enero.