Apariencia y realidad No culpes a la lluvia

Pasa otro año y la iniciativa privada potosina, al menos la que está afiliada a la corporación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), expresó su descontento con la situación actual del estado y con el desempeño de sus autoridades.

El más reciente estudio de DataCoparmex, la herramienta de la confederación para medir el sentir de sus miembros con la situación nacional, de nuevo muestra reacciones negativas.

El estado ofrece preocupantes niveles de delincuencia en contra de los socios, descubre una mala evaluación de las autoridades y advierte de que el ánimo para invertir en el estado es bajo.

En público y de dientes para afuera, las cámaras empresariales parecen ser más cautas, pero al interior de sus agrupaciones, sienten más libertad para expresar su verdadero sentir.

Las relaciones entre el gobierno estatal y los empresarios parecen estar regidas por las apariencias: presumen colaboración e intercambian abrazos y saludos de mano, pero del lado de la IP, no son raras las quejas contra, por ejemplo, la escasa promoción turística de la entidad, las deficiencias de la infraestructura o el reciente afán recaudatorio estatal reflejado en la creación del impuesto ambiental.  

Así llegan estas relaciones a la primera mitad del año.

¿Está la Fenapo por sufrir el desaire de una estrella de la música por segundo año consecutivo?

En la edición del año pasado, el gobierno estatal anunció con bombo y platillo la presencia del español Enrique Iglesias en el Teatro del Pueblo.

El asunto naufragó. Primero, con la versión oficial de que el cantante estaba enfermo y no podía atender esa fecha, que luego fue penosamente desmentida por el artista diciendo que nunca estuvo confirmado.

De hecho, el español fue bastante duro en su desmentido: “Cuidado con las difamaciones. El Señor Ricardo Gallardo a quien no tenemos el gusto de conocer tuvo a bien anunciar el concierto en abril sin contrato ni confirmación y el pasado viernes dijo que se cancelaba porque enrique sigue enfermo. Falso. El señor está mal informado”.

Y ahora, la margarita se está deshojando con Luis Miguel. Parece que pocos disfrutaron el concierto pasado por agua que dio en el Plan de San Luis y, como para sacarse la espina, el gobierno estatal anunció la presentación gratuita de “El Sol” en la Feria.

El propio mandatario se encargó de desinflar el ánimo señalando, con semanas de anticipación, que la lluvia podría afectar el concierto, por lo que modificarían la fecha del concierto, sin dar una alternativa concreta.  

La inusitada capacidad de previsión meteorológica para anticipar lluvias bien podría ser la cortina para esconder que, otra vez, se anunció el omelette sin haber tenido los ingredientes a la mano. 

¿Y por qué es relevante un asunto de naturaleza farandulera? Porque este gobierno ha convertido a la presentación de artistas y atracciones una política de estado a la que le ha invertido no pocos recursos públicos.

En el caso de Luismi, ahí están los anuncios a plana entera en diarios de la Ciudad de México anunciando la presentación. No son baratos. Y si el concierto no se realiza, ¿darán cuentas del desperdicio?    

¡HAS TA MAÑANA!