El mundo, el país y el estado se enfrentaron ayer a hitos que prueban que, por desgracia, el brutal impacto de la pandemia de coronavirus está aún por venir.
????
Ayer, el conteo mundial de contagios alcanzó y rebasó el millón de personas.
????
También el jueves, la Secretaría de Salud federal reconoció ayer 50 fallecimientos por COVID-19 en el país.
????
Y no han pasado ni 24 horas de la emisión de las cifras que prueban que el número de casos sospechosos de contagio de la enfermedad se multiplicó 1.3 veces en menos de una semana en San Luis Potosí.
????
La dirección a la que apuntan las cifras es inequívoca: todas van a aumentar, quizá de manera incontrolable, en el corto plazo.
????
Los mismos Servicios Estatales de Salud lo reconoció ayer cuando alertó del inicio, de un momento a otro, de una nueva fase de la enfermedad, esa en la que los contagios ya no son importados de otros países ni de personas cercanas, casi siempre familiares, a los enfermos originales.
????
El virus escapó del radar de los servicios sanitarios en la entidad y ya no es posible otra forma de hacerle frente que dejarlo sin eslabones que continúen la cadena de contagio.
????
El retiro absoluto de la gente de las calles es, ahora, la mejor arma que tiene el estado para evitar la catástrofe. Estamos en la etapa en la que la distancia ya no sólo es sana, sino vital.
????
Por desgracia, no todos parecen concordar con la idea y, pese al cierre de oficinas públicas, escuelas, empresas privadas y centros de reunión pública, un buen número de personas persiste en arriesgarse.
????
El país y el estado han endurecido las medidas para tener a la mayor parte de la ciudadanía en sus casas. Y una proporción importante de ella las está cumpliendo.
????
Pero aún no son los suficientes para dejar al virus sin su vehículo para hacer más daño. El temor a las consecuencias puede ser un mecanismo para lograr que más personas se encierren.
????
Pero quizá sea necesario que a las medidas de apremio para la cuarentena tengan dientes. El Estado tiene la facultad de la coerción. Quizá es tiempo de que la ejerza un poco.
????
Que la contingencia sanitaria no sirva de oportunidad para que otros aspectos importantes, como el millonario tiradero que es la fallida obra del metrobús pasen desapercibidos.
????
Una obra en la que se invirtieron 75 millones de pesos empezó a ser demolida. La Seduvop debe explicar cómo es que éste desperdicio de dinero ocurrió.
¡HASTA MAÑANA!