Alrededor de 72 mil vallenses en pobreza batallarán con la restricción de salir de casa, porque tienen que trabajar o llevarse a sus hijos a la calle con ellos, por no tener con quien dejarlos.
Mientras que en Xilitla, la población ha seguido con sus actividades normales. En las mañanas se puede ver una larga fila al exterior del banco en donde no se respeta el metro y medio de distancia recomendado como medidas sanitaria.
La mayoría de la población se saluda de mano y abrazo, como si nada pasara y es que para muchos el tema del Covid-19 es únicamente un “distractor del gobierno”, dejando de lado las medidas tan sencillas emitidas por el sector salud.
Los policías municipales trabajan normal, no portan guantes ni cubrebocas y siempre andan en grupos.
Miguel Ángel Guzmán Michel, catedrático de la UASLP y líder del Frente Popular Francisco Villa dijo que los pobres entrarán a una espiral de desesperación con el aislamiento.
Manifestó que a la clase alta, el 20% de la población, no le pasará nada con quedarse dentro de sus casas; la clase media, en cambio se empobrecerá, dado que sus negocios no tendrán circulante y en sus trabajos habrá medidas de austeridad.