Matehuala.- Las quejas de derechohabientes de la clínica IMSS No. 10 aumentan por el mal servicio que reciben y no llegan a sanar de sus males.
Ante este medio José René N. declaró que la semana pasada fue a consulta a la clínica y no pudo surtir la receta de sus medicamentos que requiere para sanar, porque estaban en auditoría y la farmacia estaba cerrada.
Pero ayer acudió a surtir su medicamento, la farmacia ya estaba abierta pero ahí le dijeron que esa receta ya estaba caducada, generando su molestia pues el médico se la había entregado un día antes, y como solución le pidieron acudiera con su médico para que le hiciera otra. Refiere que resulta indignante que la receta haya caducado en un lapso de cuatro a cinco días, y el problema que representa tener otra cita médica.
José René menciona que esto es un trato inhumano, ya que mientras avanza su enfermedad y eso parece importarles poco.
Son muchos los derechohabientes que están inconformes por el servicio que reciben en la institución médica y ya recaban firmas para enviar un escrito al presidente de la República denunciando estos hechos.
Hay pacientes que sufren hasta depresión, al no tener los recursos suficientes para comprar el medicamento que les recetan, por lo que la salud que se dice es un asunto primordial, deja mucho que desear en Matehuala.