DÜSSELDORF, Alemania (AP) — Xabi Alonso y el Bayer Leverkusen experimentado prácticamente todo lo que el fútbol tiene que ofrecer. Tener que recuperarse tras una derrota no fue una de estas.
Leverkusen enfrentará el sábado al Hoffenheim tras su derrota en el último encuentro de liga 3-2 ante Leipzig. Fue su primera caída en la Bundesliga desde mayo 2023.
Alonso dijo el viernes que intentará que el equipo recupere la concentración y atención que al parecer les falto en el duelo en el que el Leverkusen tuvo 27 disparos, pero el incisivo contraataque del Leipzig terminó marcando la diferencia.
"Necesitamos tener mejor control cuando no tenemos el balón", indicó el técnico el viernes. "Necesitamos mantenernos estables sin el balón, ser más agresivos, no demasiado pasivos. Creo que concedimos muy fácil algunas oportunidades y ese es un tema futbolístico, pero también mental".
La racha sin perder de la temporada pasada del Leverkusen fue algo fuera de lo ordinario. El equipo de Alonso anotó goles tardíos con regularidad para salvar un punto o ganar un juego crucial, que esta derrota parecía inevitable, como parte de su identidad.
La racha del Leverkusen sin perder en todas las competencias terminó en 51 encuentros con la derrota en mayo ante el Atalanta en la final de la Liga Europa. Su racha sin derrotas en Alemania se extendió por 15 meses hasta la derrota ante Leipzig, incluyendo terminar invicto la campaña de la Bundesliga por primera vez en la historia.
Por el descanso internacional, Alonso y su equipo tuvieron dos semanas para reflexionar sobre la derrota antes de visitar al Hoffenheim —y la visita en la Liga de Campeones al Feyenoord el jueves. Aunque el técnico ha tenido poco contacto con sus jugadores internacionales.
"Es una preparación exprés, una conversación exprés", admitió. "No son muchas cosas, pero hay mucho que demostrar. Hemos tenido suficiente tiempo para analizar y discutir cómo podemos ser mejores, esperemos tener una mejor y más completa actuación".
El Hoffenheim es otro equipo que el Leverkusen venció en los minutos finales la temporada pasada. El 30 de marzo, Hoffenheim parecía que iba a ganar 1-0, pero Robert Andrich anotó a los 88 minutos y Patrik Schick los puso al frente al 91. Leverkusen terminó ganando 2-1.