Los Ángeles, EUA.- La Unión Ciclista Internacional (UCI) confirmó meses atrás que el Comité Olímpico Internacional (COI) aceptó al BMX freestyle como parte del programa de los Juegos Olímpicos Tokio 2020, una noticia que pareciera positiva para dicha disciplina.
Sin embargo, la división de opiniones está presente entre los mismos exponentes, pues este deporte de acción se trataba de algo que comenzó como un “hobby”, convivencia, sin importar los resultados conseguidos.
“La evolución ha sido brutal, ha subido un escalón gigante, no soy muy fanático de las Olimpiadas, pero ha mejorado muchísimo, más gente practicándolo y mucho más apoyo con sponsors (patrocinadores) nuevos”, dijo a Notimex el español Sergio Layos.
El ibérico de 33 años de edad añadió que “hay gente que había dejado el deporte y se ha vuelto a meter para conseguir estar ahí (en Juegos Olímpicos), hay dinero de por medio y se ha dejado de ver como diversión, pero también es una disciplina, lo hacemos por pasión y eso no va a cambiar nunca”.
Teresa Fernández Miranda, también española y parte del Vans BMX Pro Cup que se efectúa en Huntington Beach, entiende que competir por un sitio en la máxima justa deportiva implicaría, tal vez, que cambie el ambiente entre los ciclistas de freestyle.
“Me siento a gusto montando con mis amigos, colegas, sin competitividad, los torneos que son para puntuar a Olímpicos son diferentes, hay otro ambiente; a mí, personalmente, no me hace gracia competir, yo voy a pasármelo bien, a conocer gente”, indicó.
Si bien el ser incluido en el programa olímpico puede aumentar la popularidad del BMX, también obliga a que cada deportista tenga mayor disciplina, el ambiente puede ser menos cómodo de lo acostumbrado, en el que todos se ven como una familia y pelear por una medalla olímpica podría romper relaciones.
Para Tokio 2020, el ciclismo en la categoría estilo libre estará presente por primera vez en unos Juegos Olímpicos, se efectuará en un skatepark y repartirá medallas en categoría femenil y varonil. Se desconoce si por esa división de gustos asistirán a la justa japonesa los mejores “riders” del orbe.