Muy criticada ha sido por el medio futbolístico nacional la designación de los árbitros que pitarán la final del torneo mexicano entre Cruz Azul y América.
Fernando Hernández irá al juego de ida mientras que Marco Ortiz, a falta de oficializarse, pitará la vuelta.
Ambos silbantes tienen la característica de que no pasaron por las semifinales, lo que llamó la atención de la prensa, de los equipos y del mismo gremio arbitral, que no entendieron por qué este par de silbantes de los cuartos dieron el salto a los juegos por el título.
Cuando en el grupo de árbitros se enteró que Hernández y Ortiz eran los elegidos, se sorprendieron, pero hubo más indignación, aunque prefirieron guardar silencio para no afectar al grupo.
Muchos pensaban que por lo realizado en la Liguilla, "El Cantante" Fernando Guerrero sería uno de los designados y el otro César Ramos. Ambos tuvieron buenas actuaciones en los juegos que les tocaron en cuartos de final y en semifinales.
Las designaciones caen en la mayoría de las ocasiones en poder del chileno Enrique Osses, director del área técnica, mientras que Armando Archundia, presidente de la Comisión de Árbitros se encarga más que nada de temas de oficina.
Está claro, dicen dentro de la Comisión, que todo está enfocado para relanzar la carrera de Fernando Hernández, quien hace un año fue castigado por golpear a Lucas Romero, jugador del León en ese entonces, durante un juego contra el América en el Clausura 2023.