DUBLÍN (AP) — El Bayer Leverkusen está a dos partidos de la inmortalidad en el fútbol europeo.
Los flamantes campeones de Alemania disputarán dos finales de copa en cuatro días — la primera será el miércoles en la Liga Europa contra Atalanta — para completar una asombrosa temporada invicta en competiciones domésticas e internacionales.
El sábado, el Leverkusen será el abrumador favorito en la final de la Copa Alemania ante un Kaiserslautern que finalizó 13ro en la segunda división, muy cerca de caer en los playoffs de descenso.
Entonces, el gran desafío para el equipo del técnico Xabi Alonso es el partido número 52 de 53, en Dublín, frente a un Atalanta que ha cerrado la temporada pisando fuerte.
Lo apropiado considerando que la Liga Europa le ha deparado momentos dramáticos al Leverkusen.
Tres veces en seis partidos en la fase de eliminación directa, el conjunto estuvo perdiendo 2-0 en el tramo final del segundo tiempo, e incluso abajo en los descuentos: en ambos duelos de octavos contra Qarabag y en la vuelta de las semifinales ante la Roma.
También mantuvieron a flote el invicto en Europa cuando visitaron a West Ham en los cuartos de final. El Leverkusen parecía encaminado a clasificarse con el resultado del marcador global, pero precisó de un gol a los 89 minutos del lateral derecho Jeremie Frimpong para igualar 1-1 y seguir invicto.
"No queremos esperar hasta los últimos segundos del partido", dijo el atacante checo Patrick Schick, cuyos tres goles en los descuentos ante Qarabag en marzo, para avanzar 5-4 en el global. "Queremos que se entienda, hay que sentenciarlo temprano".
Otros grandes clubes europeos añadieron el trofeo de la prestigiosa Liga de Campeones tras conquistar el título doméstico, a diferencia de un Leverkusen que aspira por el segundo torneo en importancia del continente.
De todas formas, lo del Manchester United en 1999, Inter de Milán en 2010, Barcelona en 2011 y Manchester City el año pasado era anticipado. Cada uno de esos equipos empezó su temporada con planteles repletos de luminarias y con técnicos de renombre — Alex Ferguson, Jose Mourinho, Pep Guardiola — quienes ya se habían consagrado en múltiples competiciones.
Esta fue la primera temporada completa de Alonso al más alto nivel. Su equipo estuvo penando con el descenso la pasada temporada. No ficharon a ninguna estrella durante el verano.
"Es algo muy especial", indicó el entrenador español de 42 años la semana pasada. "Mi primer título como entrenador es la Bundesliga. Realmente especial. Pero un título en Europa sería maravilloso y ojalá podamos hablar de eso".
Alonso se coronó dos veces en la Liga de Campeones como un sobrio volante en Liverpool y luego con el Real Madrid, que enfrentará al Borussia Dortmund por el título de la actual edición de la Liga de Campeones.