Sorpresas y emociones en los Juegos Olímpicos de Tokio

Emocionante jornada de atletismo en los Juegos Olímpicos

SAINT-DENIS, Francia (AP) — La carrera fue catalogada como una auténtica batalla campal entre los dos corredores más feroces de los 1.500 metros.

Nadie se imaginó que un novicio acabarían robándose el espectáculo y de paso llevarse la medalla olímpica de oro.

El estadounidense Cole Hocker protagonizó la gran sorpresa del atletismo de los Juegos Olímpicos al eclipsar por más de tres segundos su mejor registro personal para derrotar los favoritos Jakob Ingebrigsten y Josh Kerr por el título de los 1.500 metros.

Hocker ganó la carrera con un récord olímpico de 3 minutos y 27.65 segundos, emergiendo del quinto puesto al primero en los últimos 300 metros y superar a los dos corredores cuya rivalidad había acaparado la atención en la previa.

"Esto quizás sorprendió a mucha gente, pero si ustedes hubieran estado prestando atención a mi temporada, hubieran sabido de lo que soy capaz", dijo Hocker. "Igualmente, las cosas tenían que alinearse a mi favor".

Hocker, alguien que no asomaba entre los favoritos al oro, derrotó a Kerr por 14 centésimas de segundos. Ingebrigsten, quien marcó el ritmo durante los primeros 1.250 metros, acabó en el cuarto puesto por detrás del estadounidense Yared Nuguse.

Matt Centrowitz había sido el último estadounidense en coronarse en los 1.500, en Río de Janeiro 2016. Y es la primera vez que los estadounidenses colocaron a dos hombres en el podio de los 1.500 desde Estocolmo 1912.

Todas las miradas estaban puestas en Ingebrigtsen, el reinante campeón de Noruega que quería mandar un mensaje, y Kerr, el británico que le derrotó en el Mundial del año pasado en Budapest.

Desde esa victoria, Kerr y Ingebrigtsen han estado lanzándose dardos. Uno de ellos fue que Kerr sostuvo que Ingebrigsten apenas ha ganado carreras con la ayuda de marcadores de ritmo, algo que no se permite en carreras de esta magnitud.

Ingebrigtsen se apoderó del liderato inmediatamente y se mantuvo al frente por las primeras tres vueltas y medio, con Kerr alternándose entre el segundo y tercer puesto, reservándose para lanzar un ataque para rebasar Ingebrigtsen en la recta final, como lo hizo el año pasado.

"Desde luego que he cometido un error táctico al no haber podido disminuido mi ritmo en los primeros 800", dijo Ingebrigtsen.

Mientras el noruego y el británico se sacaban chispas, Hocker — alguien más pequeño que los dos favoritos, luchaba por encontrar un espacio.

Intentó colarse por el interior, pero Ingebrigtsen le tapó.

Hocker se reacomodó y esperó para intentar otra vez. Tanto él como Kerr, quien iba por fuera, dejaron atrás a Ingebrigtsen, y luego Hocker superó al británico para llegar primero a la meta.

Gabby Thomas gana los 200, un oro cantado

Aproximadamente una hora después de esa sorpresa, Estados Unidos se apuntó una victoria que había sido ampliamente pronosticada cuando Gabby Thomas aceleró en la curva para ganar el título de los 200 metros con una diferencia de 25 centésimas, mucho más amplia a la de Hocker.

Thomas cronometró 21.83 segundos para añadir el oro al bronce que obtuvo en la misma prueba en Tokio hace tres años.

Egresada de la Universidad y con un Masters en salud pública, la velocista de 27 años se apoderó de la punta en la curva y nadie pudo desafiarla en la recta final. Pegó un grito de asombro tras cruzar la meta.

Thomas superó a Julien Alfred, la corredora de Santa Lucía que el sábado se coronó en los 100. El bronce fue para la estadounidense Brittany Brown, quien aventajó por apenas dos centésimas a la británica Dina Asher-Smith.

Cumplidos tres de los sprints en la pista púrpura del Stade de France, los estadounidense han acaparado dos oros: Thomas siguió los pasos de Noah Lyles, quien subió a lo más alto de los 100 masculinos.

Tentoglou gana salto largo y Rogers se impone en lanzamiento de martillo

El griego Miltiadis Tentoglou conquistó su segundo oro consecutivo en el salto de longitud masculino. Estados Unidos quedó fuera del podio por apenas segunda en una edición de los Juegos sin boicot desde 1896.

La canadiense Camryn Rogers agregó el oro olímpico en lanzamiento de martillo al oro que logró en el Mundial del año pasado, mientras que Winfred Yavi de Bahréin se llevó los 3.000 metros con obstáculos femeninos.