BUENOS AIRES (AP) — En el mismo país que denostó al astro Lionel Messi por un subcampeonato de fútbol, ellas se han convertido en un símbolo de perseverancia en la derrota.
Las Leonas, el seleccionado femenino del hockey sobre césped de Argentina, buscan sin suerte desde hace 24 años hacer cumbre en el podio olímpico. Tuvieron el oro al alcance de la mano en Sydney 2000, Londres 2012 y Tokio 2021. En Atenas 2004 y Beijing 2008 se colgaron el bronce.
Pero cada traspié no hizo más que agigantar la popularidad del deporte por equipos más practicado por las mujeres en Argentina.
Volverán a intentarlo en los Juegos Olímpicos de París.
"Las Leonas representan mucho más que ser jugadoras de hockey", dijo la mediocampista Eugenia Trinchinetti, la autora del gol que le dio a la Argentina el título en los Juegos Panamericanos de 2023 en Santiago y el boleto a París, durante una reciente entrevista con The Associated Press en el club Ciudad de Buenos Aires, centro de entrenamiento del seleccionado.
"Va de la mano del país en el que estamos. Las condiciones que tenemos. Muchas veces no son las adecuadas ni las mejores, y aun así ponemos nuestro mejor esfuerzo, todo nuestro corazón, entrega, garra, en plasmar esto que amamos", remarcó la jugadora, en referencia a las dificultades que enfrenta el deporte no profesional en Argentina al ritmo de sus repetidas crisis económicas y el flagelo de la inflación (276,4% interanual en mayo).
Las Leonas son una de las pocas favoritas para cosechar el oro en París dentro de una delegación de 135 atletas clasificados hasta el momento, una cifra inferior a los 181 de Tokio.
En el fútbol argentino, más popular y millonario, los segundos puestos no se toleran. Bien lo sabe el capitán Lionel Messi, quien antes de levantar la Copa del Mundo en Qatar 2022 se alejó de la selección un tiempo por las duras críticas que recibió tras una seguidilla de finales fallidas.
El hockey era considerado una práctica de las clases más pudientes hasta el siglo pasado. La leyenda de las Leonas del hockey nació en Sydney, donde salieron a jugar un partido decisivo ante Holanda en segunda ronda con el dibujo de una leona en la parte superior derecha de la camiseta.
Tras la medalla de plata en aquella cita olímpica, las Leonas originales se convirtieron en celebridades locales y miles de niñas en todo el país empezaron a practicar el deporte, soñando algún día con convertirse en una de ellas.
"Estos 20 años de vigencia de las Leonas está basado en los valores, que son el compromiso, tener el país por delante, dar el 110% independientemente de todo, dejar egos de lado y poner siempre por delante el nombre de Las Leonas", enumeró el actual entrenador Fernando Ferrara.
"Cuando una jugadora entra en el proceso de selección, el primero que tenemos es el seleccionado junior, las ´Leoncitas´. Ahí se empiezan a transmitir esos valores. Es muy importante la etapa de formación", valoró el estratega.
Tras el subcampeonato en el Mundial de España 2022, Ferrara reunió a sus dirigidas en el aeropuerto antes de emprender el regreso y les planteó que las quería "a todas juntas en Buenos Aires" un año antes de los Juegos Olímpicos, lo cual implicaba rechazar ofertas para jugar en el exterior que les hubieran permitido hacer una diferencia económica.
"Sí hay ofertas, sí se hace la diferencia", afirmó Agostina Alonso, una de las capitanas. "Pero no hubo ninguna del grupo que dijo ´no´. Tenemos que estar juntas entrenando, todos los días de la semana, 24X7 a disposición de nuestra prioridad hoy, que es formar el mejor equipo para competir en París".
Argentina abrirá el certamen olímpico ante Estados Unidos el 27 de julio por el Grupo B, que también integran Australia, Gran Bretaña, España y Sudáfrica.
Las campeonas mundiales Holanda y China, las otras favoritas a colgarse el oro, comparten el Grupo A.
"Para ganar el oro se necesita estar en nuestra mejor versión y que se alineen los planetas", reflexionó Ferrara. "El diferencial de nuestras jugadoras es la mentalidad, tratar de resolver siempre, ir en contra las dificultades. No nos ahogamos en un vaso de agua. No vamos a aflojar. Es un poco la cultura que tenemos por lo que nos toca vivir".