CIUDAD DE MÉXICO, marzo 17 (EL UNIVERSAL).- Chivas y América terminaron sin hacerse daño en el tercer y último Clásico Nacional que disputaron en un lapso de 10 días.
El Rebaño y las Águilas dividieron unidades tras igualar sin anotaciones sobre la cancha del Estadio Akron.
Sin embargo, el grupo de jugadores y el cuerpo técnico rojiblanco no quedó satisfecho con las decisiones del árbitro central, Fernando Hernández.
El nazareno decidió no señalar un posible penal a favor de la escuadra tapatía luego de un contacto de Sebastián Cáceres sobre Roberto Alvarado durante la primera mitad.
Incluso los integrantes del Video Assistant Referee (VAR) estuvieron de acuerdo con el señalamiento y lo corroboraron tras revisar las repeticiones necesarias.
La Comisión de Árbitros de la Federación Mexicana de Futbol (FMF) reveló las conversaciones entre el silbante y los presentes en la cabina durante el Clásico Nacional.