Berlín.- Un milagroso tanto final del portugués Francisco Conceição sirvió para que un accidentado Juventus se impusiera por 2-3 a domicilio al Leipzig, en un partido en el que los italianos tuvieron que remontar dos veces y en el que jugó más de media hora con diez.
Necesitado de una victoria tras la agónica derrota sufrida en el debut europeo ante el Atlético de Madrid en el Metropolitano, el conjunto de Marco Rose puso en liza todo su arsenal ofensivo ante la ‘Vecchia Signora’, invicta en este comienzo de temporada.
El balón apenas circulaba, ni se tiraban desmarques, ni nadie se ofrecía; es decir, el escenario que más le incomoda al Leipzig. Hacía falta una acción aislada para inflamar el duelo y esta llegó cuando menos lo esperaba el conjunto transalpino.
Tras estar a punto de adelantarse el cuadro turinés en un disparo desde fuera del área de Fagioli que casi sorprendió a Gulacsi tras un rebote en Vlahovic, el inmediato contraataque se tradujo en un pase bombeado al hueco por Openda que descolgó en postura poco ortodoxa el gigante esloveno Benjamin Sesko, para definir con tanta violencia como efectividad ante la media salida del meta Di Gregorio.
El tanto no le insufló casi nada de impulso al equipo del este de Alemania; mientras que el bicampeón continental, con más corazón que cabeza, trataba de conectarse a un partido en el que, poco después del gol, reclamó una pena máxima tras recibir el delantero serbio dentro del área un imprudente planchazo del defensa francés Lukeba.