BEIJING (AP) — El Ministerio de Comercio de China acusó el jueves a la Unión Europea de hacer exigencias irrazonables en su investigación sobre las importaciones de vehículos eléctricos chinos antes de anunciar un aumento de los aranceles hasta en un 38%.
El vocero del ministerio, He Yadong, afirmó que la parte europea había exigido cantidades excesivas de información a los fabricantes de automóviles chinos y luego acusó injustamente a las compañías chinas de no cooperar.
"Los tipos, el alcance y la cantidad de información recopilada por la parte europea no tienen precedentes y superan por mucho los requisitos de las investigaciones contra subsidios", dijo. Añadió que eso incluía exigir detalles sobre fabricación y desarrollo, tecnología y fórmulas de productos, entre otros aspectos, a las empresas chinas de vehículos eléctricos y baterías.
"Pese a que las compañías chinas hicieron todo lo posible para cooperar con la investigación y proporcionaron información, la Comisión Europea aún así acusó injustificadamente a las compañías chinas de no cooperar plenamente e impuso altos aranceles punitivos", subrayó, describiendo a las compañías chinas como "conmocionadas y decepcionadas".
El portavoz chino no anunció ninguna nueva medida en represalia por el aumento provisional de los aranceles, que, según dijo, carece de "base fáctica y jurídica". Pero reiteró la advertencia de Beijing de que defenderá los derechos e intereses de las compañías chinas.
El lunes, Beijing anunció que está abriendo una investigación antidumping sobre las exportaciones de carne de cerdo de Europa. Al anunciar eso, el Ministerio de Comercio no mencionó las tarifas de los vehículos eléctricos. Pero la pesquisa sobre diversos productos porcinos se considera en general una respuesta a las medidas de la UE sobre los vehículos eléctricos.
En una escalada de una disputa comercial sobre los subsidios de Beijing que a Bruselas le preocupa que perjudiquen a las automotrices europeas, la UE planea imponer aranceles provisionales del 17,4% al 38,1% a los vehículos eléctricos de China durante cuatro meses a partir del 4 de julio. Se aplicarán a los vehículos exportados a Europa tanto por marcas chinas como de otros países, incluyendo Tesla.
La parte europea ha dicho que quiere discutir los resultados de su investigación con las autoridades chinas a fin de hallar maneras de resolver los problemas.