Los reguladores de seguridad de automóviles de Estados Unidos están investigando informes de que los motores pueden incendiarse en algunas camionetas Jeep incluso con el motor apagado.
La investigación abarca más de 781.000 vehículos Jeep Wrangler y Gladiator de los años 2021 a 2023.
La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA por sus siglas en inglés) señaló en documentos publicados el lunes en su página web que tiene nueve quejas de incendios del motor de los propietarios, incluyendo uno que causó una lesión. La mayoría de los informes dicen que los incendios comenzaron en el lado del pasajero del compartimiento del motor.
La agencia resaltó que un incendio con el motor apagado "puede resultar en un mayor riesgo de lesiones de los ocupantes, lesiones a las personas fuera del vehículo, y daños a la propiedad, con poca o ninguna advertencia".
Los investigadores se pusieron en contacto con el fabricante de Jeep, Stellantis, y se les informó de varios otros "eventos térmicos" que comenzaron en un conector eléctrico de la bomba de dirección asistida.
La NHTSA indicó que está abriendo la indagación para determinar la causa y el alcance del problema y con qué frecuencia sucede. No se ha emitido ninguna llamada a revisión, pero es posible que se lleve a cabo.
Stellantis ha declarado que está cooperando con la pesquisa.
Michael Brooks, director ejecutivo de la organización sin fines de lucro Centro para la Seguridad del Automóvil, consideró prudente que los propietarios de los Jeeps bajo investigación aparquen sus vehículos al aire libre hasta que el problema se resuelva porque la NHTSA está citando un riesgo de daños a la propiedad.
"Si yo tuviera uno de estos vehículos, desde luego no querría estacionarlo en un garaje", subrayó Brooks.