Seúl, Corea del Sur.- El Parlamento surcoreano aprobó una moción presentada por la oposición para destituir a Han Duck-soo, primer ministro y presidente en funciones desde hace apenas dos semanas, ahondando la crisis institucional en la que está sumida el país desde la declaración de la ley marcial a principios de mes.
La inhabilitación de Han, que había heredado las funciones del también destituido Yoon Suk-yeol, supone la primera vez en democracia que Corea del Sur cesa a un jefe de Gobierno y de Estado interino e implica que el cargo lo ostentará de manera provisional el ministro de Finanzas y viceprimer ministro, Choi Sang-mok.
La iniciativa fue aprobada por 192 votos a favor, el número total de escaños que suma la oposición, y contó con el boicot del gobernante y conservador Partido del Poder Popular (PPP).
“Respeto la decisión de la Asamblea Nacional (Parlamento) y, para no aumentar la confusión y la incertidumbre, suspenderé mis funciones de acuerdo con las leyes pertinentes y esperaré la rápida y juiciosa decisión del Tribunal Constitucional (que deberá ahora ratificar o no su inhabilitación)”, dijo por su parte Han en un comunicado.
Por su parte, Choi, como nuevo presidente interino, emitió un escrito en el que aseguró que “el Gobierno hará todo lo posible para garantizar la estabilidad institucional.
El Constitucional está juzgando a Yoon Suk-yeol por su declaración de la ley marcial del pasado 3 de diciembre, y tiene hasta el 11 de junio para ratificarla o no.
El PD está tratando de garantizar que la destitución de Yoon quede finiquitada lo antes posible para que así se convoquen unas elecciones presidenciales anticipadas en las que sería un claro favorito.
El cese de Han aboca ahora a una incertidumbre aún mayor, puesto que la oposición ha dicho que seguirá presionando al Gobierno para que renueve el Constitucional y apruebe investigaciones contra Yoon y la primera dama y que seguirá presentando cuantas mociones de destitución sean necesarias.