WASHINGTON (AP) — El secretario de Estado Antony Blinken regresa esta semana al Medio Oriente en su duodécima visita desde que estalló la guerra entre Israel y Hamás el año pasado, pero es la primera desde la destitución del presidente sirio Bashar Assad, que ha desencadenado nuevos temores de inestabilidad en la región, ahora afectada por tres conflictos a pesar de un acuerdo de alto el fuego en Líbano.
Blinken viajará a Jordania y Turquía el jueves y viernes para conversaciones que se centrarán principalmente en Siria, pero también abordarán las esperanzas de alcanzar un acuerdo para poner fin a los combates en Gaza que han devastado el territorio desde octubre de 2023.
El Departamento de Estado indicó que Blinken se reuniría con funcionarios jordanos, incluido el rey Abdula II, en la ciudad portuaria de Aqaba el jueves antes de volar a Ankara para reunirse con funcionarios turcos el viernes. También son posibles otras paradas en la región, dijeron los funcionarios.
Blinken "reiterará el apoyo de Estados Unidos a una transición inclusiva liderada por Siria hacia un gobierno responsable y representativo", dijo el portavoz del departamento, Matthew Miller, en un comunicado.
"Discutirá la necesidad de que el proceso de transición y el nuevo gobierno en Siria respeten los derechos de las minorías, faciliten el flujo de asistencia humanitaria, impidan que Siria sea utilizada como base de terrorismo o represente una amenaza para sus vecinos, y aseguren que los arsenales de armas químicas estén asegurados y destruidos de manera segura", agregó Miller.
Blinken es el más reciente alto funcionario estadounidense en viajar a Medio Oriente desde que Assad huyó a Rusia el domingo mientras el presidente demócrata Joe Biden se prepara para dejar el cargo el 20 de enero de 2025, y el republicano Donald Trump asume el poder.
El asesor de seguridad nacional de Biden, Jake Sullivan, está en Israel. El comandante de las fuerzas estadounidenses en la región visitó a las tropas estadounidenses en Siria el martes. Dos altos funcionarios del Departamento de Estado —John Bass, subsecretario de Estado para asuntos políticos, y Barbara Leaf, secretaria de Estado adjunta para asuntos del Cercano Oriente — han estado en la región desde el fin de semana.
Trump, quien ha hablado de su deseo de ver los conflictos terminar antes de que regrese a la Casa Blanca, ha enviado al diplomático Stephen Witkoff a la región.