El Gobierno brasileño estableció este miércoles el derecho de los prisioneros transexuales y no binarios a escoger la cárcel de su preferencia con base en la autodeclaración de identidad de género. La norma, publicada en el Diario Oficial de la Unión, prevé que los jueces pidan durante el proceso a los reos su autodeclaración de identidad de género y, en el caso de transexuales y no binarios, su preferencia sobre si quieren cumplir la pena en una unidad penitenciaria masculina o femenina. Los funcionarios penitenciarios tendrán que cumplir con la decisión judicial independientemente de si las personas transexuales han actualizado sus documentos de identidad o realizado intervenciones de reasignación de sexo.
Además, los reos transexuales y no binarios tendrán el derecho a la inclusión de su nombre social en los documentos producidos por la cárcel y a ser llamados de esa manera por los policías, aunque en el registro civil todavía aparezca el nombre original. El objetivo de la norma es "garantizar los derechos a la integridad sexual, a la seguridad del cuerpo, a la libertad de expresión de la identidad de género y al reconocimiento del derecho a la autodeterminación de género".
Tanto a los transexuales como a los gays, lesbianas, bisexuales y pansexuales se les dará la opción de escoger si quieren ser recluidos en el ala general de la cárcel o en una área específica para miembros de la comunidad. La resolución apunta que las celdas destinadas a la población LGBTI no deben ser utilizadas para aplicar medidas disciplinares a personas que no son integrantes de esta comunidad ni pueden ser usadas por acusados de cometer crímenes sexuales. La resolución recoge jurisprudencia de la Corte Suprema del país suramericano, así como normas internacionales para la protección de la comunidad LGBTI.
En caso de sospecha de falsedad en la autodeclaración de identidad de género, el juez deberá llamar a psicólogos, trabajadores sociales y a la Fiscalía para determinar si mantiene al reo en la unidad que escogió. EFE.