KIEV, Ucrania (AP) — El gobierno del presidente Joe Biden está decidido a garantizar, en sus últimos meses, que Ucrania pueda seguir combatiendo la invasión a gran escala de Rusia el próximo año, enviándole la mayor cantidad de ayuda posible para que pueda mantener a raya a las fuerzas rusas y tenga una posición fuerte en cualquier posible negociación de paz, dijo el miércoles el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
"El presidente Biden se ha comprometido a garantizar que cada dólar que tengamos a nuestra disposición se distribuya antes del 20 de enero", cuando el presidente electo Donald Trump asumirá el cargo, dijo Blinken.
Los países de la OTAN deben centrar sus esfuerzos en "asegurarse de que Ucrania tenga el dinero, las municiones y las fuerzas movilizadas para luchar eficazmente en 2025, o para negociar la paz desde una posición de fortaleza", dijo Blinken durante una visita a Bruselas.
Estados Unidos "se adaptará y ajustará" al equipo más reciente que envía, dijo Blinken, sin proporcionar detalles.
La guerra, que cumple su tercer año en febrero, no ha mostrado signos de disminuir.
Por primera vez en 73 días, Rusia atacó Kiev el miércoles por la mañana con una sofisticada combinación de misiles y drones. Esto ocurrió un día después de que el Pentágono indicara que la mayoría de las tropas norcoreanas enviadas para apoyar el esfuerzo bélico de Moscú combaten para expulsar al ejército ucraniano de suelo ruso en la región fronteriza de Kursk.
Ucrania también se esfuerza por contener un embate ruso, que ha durado varios meses, en la región oriental de Donetsk.
La incertidumbre política sobre cómo cambiará el gobierno estadounidense su política sobre la guerra en el gobierno de Donald Trump es un nuevo factor clave en el conflicto. La ayuda militar de Estados Unidos es vital para Ucrania, pero Trump ha señalado que no quiere seguir dando decenas de miles de millones de dólares a Kiev.
Las alertas antiaéreas sonaron durante horas mientras Rusia atacaba ocho regiones de Ucrania con seis misiles balísticos y de crucero y 90 drones, según la fuerza aérea ucraniana.
Las defensas antiaéreas derribaron cuatro misiles y 37 drones, y otros 47 drones fueron detenidos con interferencias electrónicas, indicó el comunicado. Aún se evaluaban los daños.
El ataque aéreo ocurrió mientras la mayoría de los más de 10.000 soldados norcoreanos enviados por Pyongyang para ayudar a Moscú en la guerra combatían en la región fronteriza rusa de Kursk, según el Pentágono. Una incursión del ejército ucraniano en Kursk hace tres meses logró ocupar un amplio territorio y avergonzar al Kremlin.
El ejército ruso ha entrenado a los soldados norcoreanos en artillería, empleo de drones y operaciones básicas de infantería, incluyendo el despeje de trincheras, informó el martes el viceportavoz del Pentágono, Vedant Patel, en una conferencia de prensa. La cooperación enfrenta desafíos, según el Pentágono, entre ellos, cómo alcanzar la interoperabilidad militar y superar la barrera idiomática.
Funcionarios de Kiev dicen que Rusia ha desplegado unos 50.000 soldados en Kursk en un intento de expulsar a los ucranianos.
En los últimos meses, Rusia ha reunido fuerzas para una contraofensiva en Kursk, según el Instituto para el Estudio de la Guerra, aunque se desconoce el cronograma de la operación.