Audiencias en el Congreso revelan fallas en Boeing

Investigación sobre seguridad en Boeing en el Congreso

Boeing estará en el ojo público el miércoles en dos audiencias consecutivas en el Senado estadounidense, mientras el Congreso examina acusaciones de fallas de seguridad graves en el atribulado fabricante de aeronaves.

En la primera sesión comparecerán miembros de un panel de expertos que encontraron fallas graves en la cultura de seguridad de Boeing.

El evento principal será una segunda audiencia donde comparecerá un ingeniero de Boeing que afirma que varias secciones del revestimiento de los aviones 787 Dreamliner no están sujetadas adecuadamente y podrían desprenderse. El abogado del informante señala que Boeing ha ignorado las preocupaciones del ingeniero y ha evitado que hable con expertos sobre la corrección de los defectos.

El informante, Sam Salehpour, envió documentos a la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA), que investiga la calidad y seguridad de la fabricación de Boeing. Ed Pierson, exgerente del programa de Boeing 737, también testificará el miércoles ante una subcomisión de investigaciones del Senado. Otros dos expertos técnicos en aviación también forman parte de la lista de testigos.

El demócrata que encabeza la subcomisión de la Comisión de Seguridad Nacional y Asuntos Gubernamentales del Senado y su superior republicano han pedido a Boeing una gran cantidad de documentos que datan desde hace seis años.

Los legisladores buscan todos los registros sobre la fabricación de los aviones Boeing 787 y 777, incluidas cualesquier preocupaciones o quejas de seguridad planteadas por empleados, contratistas o aerolíneas de Boeing. Algunas de las preguntas buscan información sobre las acusaciones de Salehpour sobre paneles de compuesto de carbono mal ajustados en el Dreamliner.

Un vocero de Boeing dijo que la empresa coopera en la investigación de los legisladores y ofreció proporcionar documentos e instrucciones.

La empresa afirma que las acusaciones sobre la integridad estructural del 787 son falsas. Dos ejecutivos de ingeniería de Boeing dijeron esta semana que en las pruebas e inspecciones de diseño de los aviones —algunos de los cuales tienen 12 años de antigüedad— no se han hallado signos de fatiga o agrietamiento en los paneles compuestos. Indicaron que el material, formado de fibras de carbono y resina, es casi inmune a la fatiga, que es una preocupación constante con los fuselajes convencionales de aluminio.