SEÚL, Corea del Sur (AP) — Soldados de Corea del Sur realizaron disparos de advertencia el martes para rechazar a soldados norcoreanos que cruzaron temporalmente la frontera terrestre entre las dos naciones rivales por segunda ocasión en lo que va del mes, informaron las fuerzas armadas de Corea del Sur.
El ejército surcoreano observó un incremento de trabajos de construcción en el lado norcoreano de la fortificada frontera, para instalar lo que se sospechaba eran barreras antitanques, refuerzos en caminos y minas terrestres. Las trabajos han continuado sin interrupción pese a varias explosiones provocadas por minas que mataron o hirieron a un número no especificado de soldados norcoreanos, según el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
Según el Estado Mayor surcoreano, entre 20 y 30 soldados norcoreanos que realizaban obras de construcción no especificadas en el lado norte de la frontera atravesaron brevemente la línea de demarcación militar alrededor de las 8:30 de la mañana. Añadió que los soldados norcoreanos retrocedieron después de que Corea del Sur envió un mensaje de advertencia y realizó disparos, y que el ejército surcoreano no presenció actividad sospechosa después de eso.
Corea del Sur también hizo disparos de advertencia el 11 de junio, después de que otro grupo de soldados norcoreanos violó por unos instantes la línea de demarcación militar. El Estado Mayor Conjunto señaló que el incidente del martes ocurrió en una zona distinta a lo largo de la región central de la frontera. Añadió que no cree que los soldados norcoreanos cruzaran la frontera de forma intencional y que Corea del Norte no respondió a los disparos.
En la zona de la frontera hay una densa vegetación de árboles y plantas que podrían haber reducido la visibilidad de los soldados norcoreanos y causado que cruzaran la frontera, indicó el ejército surcoreano.
El Estado Mayor Conjunto agregó que prevé que Corea del Norte ampliará sus actividades de construcción en la frontera, lo que dijo podría ir dirigido a dificultar las deserciones de civiles o soldados norcoreanos en un momento en que el gobierno en Pyongyang intenta fortalecer su control sobre la población del país.
"Nuestro ejército vigila de cerca las actividades militares en la zona del frente mientras protegen contra situaciones accidentales", señaló el organismo militar.
Las intrusiones fronterizas se producen en medio de un aumento en las tensiones entre las dos naciones, que en las últimas semanas han usado tácticas de guerra psicológica del estilo de la Guerra Fría y han dejado en claro que ya no se apegan al acuerdo militar que firmaron en 2018 para reducir las tensiones.
La fortificada frontera coreana, conocida como la Zona Desmilitarizada, ha registrado en ocasiones derramamiento de sangre y confrontaciones violentas entre los rivales. La línea de demarcación militar marca la frontera entre las dos coreas dentro de la Zona Desmilitarizada, que mide 248 kilómetros (154 millas) de largo y 4 km (2,5 millas) de ancho. Está sembrada con unos 2 millones de minas y protegida por cercas con alambre de cuchillas, trampas para tanques y tropas en ambos lados. Es una herencia de la Guerra de Corea entre 1950 y 1953, que terminó con un armisticio, y no con tratado de paz.