QUITO (AP) — Los ecuatorianos iniciaron el jueves un inesperado feriado obligatorio de dos días debido a la falta de energía eléctrica que provoca racionamientos de hasta 13 horas diarias, en medio de una fuerte sequía que afecta a las principales centrales hidroeléctricas.
La crisis energética provocó los primeros cortes el fin de semana pero recién el martes el gobierno reconoció la situación, dispuso restricciones de abastecimiento y pidió la renuncia de la entonces ministra de Energía, Andrea Arrobo, a quien además denunció por sabotaje junto a otros 21 altos funcionarios públicos, a los que acusó de haber ocultado información crucial para evitar la crisis energética.
Las calles y avenidas de las principales ciudades del país tenían muy poco tráfico y casi sin gente debido al feriado dispuesto por el gobierno del presidente Daniel Noboa en los sectores público y privado y a la suspensión de las actividades escolares. La jornada suspendida de estos días debe ser recuperada mediante horarios extendidos la próxima semana.
Yuri Carrasco, dueño de un restaurante al norte de Quito, dijo a The Associated Press que "nosotros estamos abiertos para atender a los clientes que podamos, al menos salvar algo el día" y agregó que a las 10 de la mañana empezará el corte en su zona "y todo decae totalmente. Estamos muy preocupados porque son dos días en que nuestros clientes no llegarán a sus lugares de trabajo".
La suspensión de actividades no afecta a instituciones de salud, emergencia, energía, suministro de alimentos y agua potable, puertos y aeropuertos, entre otros.
Durante estas 48 horas de descanso las autoridades han señalado que los técnicos harán el mantenimiento de la infraestructura eléctrica. Medios locales han difundido vídeos de los embalses de las mayores centrales hidroeléctricas, en el sur del país, donde se observa una creciente capa de lodo seco donde antes había agua.
Un 78% de la energía proviene de fuentes hidroeléctricas, el resto de centrales térmicas y fuentes no convencionales como la eólica, según la Corporación Nacional de Electricidad.
En la provincia de Carchi, fronteriza con Colombia, la empresa provincial de energía eléctrica dispuso cortes de hasta 13 horas, mientras que en ciudades como Quito, Guayaquil y Cuenca, entre las más pobladas del país, se realizan racionamientos de al menos ocho horas. No se ha informado por cuánto tiempo se mantendrán los cortes.
"Vamos a trabajar estos dos días porque se necesita trabajar no sólo para comer, sino porque necesitamos el dinero para cumplir con las obligaciones no sólo de la casa, sino de los empleados y demás gastos que tenemos que cubrir", dijo a AP Mauricio Bermeo, dueño de una empresa de productos de acero.