Seúl, Corea del Sur.- El jefe de seguridad del presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, dimitió en vísperas de que las autoridades intenten arrestar de nuevo al mandatario, decisión que se cree que podría facilitar la detención.
El presidente interino Choi Sang-mok aceptó a su vez la dimisión de Park Chong-jun, jefe del Servicio de Seguridad Presidencial (PSS), y pidió consenso a los dos principales partidos del país para resolver el actual conflicto que existe entre el equipo que investiga a Yoon por su fallida declaración de la ley marcial en diciembre y el aparato de seguridad del mandatario.
En un comunicado, Choi consideró que no existe un marco legal para resolver la disputa entre el PSS y la Oficina para la Investigación de Casos de Corrupción para Altos Funcionarios (CIO), que se encararon durante horas el pasado viernes cuando el cuerpo que protege al presidente se negó a permitir el acceso a la residencia de Yoon para que fuera arrestado.
Consideran que sería la Fiscalía la que debería investigar a Yoon por supuesta insurrección y por lo tanto tachan toda la campaña de “ilegal” y han vuelto a solicitar la anulación de la orden de arresto.
Mientras, se espera que el CIO encabece en cualquier momento una nueva operación con la policía para tratar de apresar al presidente Suk-yeol.