Disputa política entre Donald Trump y Brian Kemp en Georgia

Fraude electoral y disputa política en Georgia

ATLANTA (AP) — El expresidente Donald Trump se enfrascó en un nuevo pleito con el gobernador republicano de Georgia mientras hacía campaña en este estado clave en el que busca la revancha tras su derrota de 2020, de la cual sigue culpando a funcionarios republicanos por no ceder ante sus teorías falsas de que hubo fraude electoral.

El gobernador Brian Kemp, escribió Trump en su red social, "¡debería enfocar sus empeños en combatir la delincuencia, no en combatir la unidad y al Partido Republicano!" También criticó a Marty, la esposa de Kemp, y alegó que en el pasado ambos le agradecieron su respaldo cuando Brian Kemp fue elegido gobernador en 2018.

En una publicación posterior, Trump criticó a Kemp por no ceder ante sus exigencias de que ayudara a revertir la estrecha derrota de Trump en el estado en 2020. Y en su mitin arremetió contra Kemp durante varios minutos, lo culpó de su derrota ante el presidente demócrata Joe Biden y de no impedir que un fiscal de distrito en ese estado entablara un proceso penal contra él y varios de sus allegados por sus intentos de anular los resultados.

"No metas a mi familia en esto", le respondió Kemp a Trump en la red social X, y lo exhortó a dejar de "enfrascarse en insultos personales triviales, en atacar a correligionarios republicanos y a vivir en el pasado".

Los dimes y diretes se produjeron justo antes de un mitin por la tarde, cuando miles de simpatizantes abarrotaron el mismo estadio de Atlanta donde se congregaron los simpatizantes de la vicepresidenta Kamala Harris cuatro días antes. Es probable que Georgia vuelva a ser escenario de unas elecciones muy reñidas, ya que ambas campañas están presionando fuerte para ganar el estado en un momento en que los demócratas disfrutan una nueva ola de entusiasmo luego de que Biden abandonara su candidatura a la reelección y respaldara a Harris.

Los aliados republicanos de Trump lo han instado a enfocarse en cuestiones en las que perciben que tiene una ventaja sobre Harris, especialmente la economía y la inmigración. Aunque Trump atacó a la virtual candidata demócrata sobre su postura con respecto a ambos temas, nuevamente sacó a relucir sus desacreditadas afirmaciones sobre el supuesto fraude en 2020 y dio a entender que se arrepentía de haber apoyado a Kemp dos años antes.

Trump también achacó la criminalidad en la capital de Georgia a la incapacidad de Kemp para revertir lo que Trump dijo son débiles medidas para combatir la delincuencia apoyadas por Harris.

"Su gobernador debería movilizarse y hacer algo al respecto", manifestó.

Biden derrotó a Trump en Georgia por una diferencia de 11.779 votos en 2020. Trump presionó al secretario de gobierno de ese estado, el republicano Brad Raffensperger, para que "encontrara" suficientes votos con el fin de cambiar el resultado. Posteriormente, Trump fue imputado en Georgia por sus intentos para anular las elecciones, pero el caso se mantiene en pausa mientras las cortes deciden si el fiscal del condado Fulton puede seguir procesándolo.

Mientras tanto, Kemp ha demostrado ser el insólito republicano a nivel nacional que podría mantenerse firme frente a Trump sin sacrificar su poder ni su popularidad, y en última instancia, ha fortalecido esta última.

Kemp ganó la gobernación por escaso margen en 2018, luego de que Trump lo respaldó. Pero Trump lo criticó tras los comicios de 2020, cuando Kemp certificó la lista de compromisarios de Biden, desafiando las exigencias del entonces presidente de ayudarlo a revertir la estrecha derrota que sufrió Trump en su estado.