Sídney, Australia.- El paso del ciclón Gabrielle en la Isla Norte de Nueva Zelanda dejó al menos tres muertos y más de 10.500 personas desplazadas, según datos divulgados este miércoles por las autoridades del país oceánico, que prosiguen con el rescate y ayuda a la población afectada por el desastre.
El ministro de Gestión de Emergencias, Kieran McAnulty, informó en una rueda de prensa en Wellington de la muerte de dos personas en la bahía Hawke, en la costa este de la Isla Norte y una de las zonas más afectadas por el desastre natural.
McAnulty también confirmó el hallazgo de un cuerpo aún no identificado, aunque se cree pertenecer a un bombero voluntario que se quedó atrapado el lunes en una vivienda de Auckland tras un corrimiento de tierra.
“Lo que más me ha afectado, para serles sincero, es el bombero voluntario atrapado. Es una tragedia absoluta”, dijo.
El ministro indicó además que unas 10.500 personas han sido desplazadas de sus hogares, incluyendo 9.000 residentes de la bahía Hawke.
Hasta este miércoles, los servicios de emergencia, con el auxilio de unos 250 soldados neozelandeses, han rescatado a centenares de personas, incluyendo a unas 300 que fueron evacuadas por aire en un complejo operativo después de que se refugiaran en los tejados para huir de las inundaciones.
En su paso, Gabrielle ha dejado una estela de destrucción a las infraestructuras de la Isla Norte, la más poblada del país, y a decenas de miles de personas sin energía, además de provocar daños en las carreteras y comunicaciones.
Igualmente obligará a modificar la gira oficial de la princesa Ana, hermana del rey Carlos III.