Trump y don Felipe, en compañía de sus respectivas esposas, Melania y la reina Letizia, mantuvieron su primer encuentro en la Casa Blanca, que se prolongó durante alrededor de una hora y cuarto en un ambiente de cordialidad.
“Nuestra relación ha sido extraordinaria durante muchos años y creo que especialmente ahora mismo. (Tenemos) una relación comercial excelente, y (también) la relación militar, prácticamente todo lo que se podría tener. Así que amamos España”, remarcó el presidente.
Las medidas proteccionistas también han sembrado malestar en España por el fuerte incremento arancelario a la aceituna negra, si bien no hubo ninguna mención a este asunto.
En la única pregunta que respondió a los periodistas, Trump anunció su deseo de viajar a España, aunque no concretó detalles.