HONG KONG (AP) — Las exportaciones de China se desaceleraron en noviembre y sus importaciones disminuyeron, unas cifras por debajo de las previsiones que subrayaron una posible debilidad en el comercio en un momento en que los líderes del país se esfuerzan por impulsar la economía tras el impacto de la pandemia del COVID-19.
Los datos aduaneros del martes mostraron que las exportaciones crecieron un 6,7% respecto al año anterior, por debajo del incremento del 12,7% en octubre. Los analistas habían estimado que las exportaciones aumentarían más del 8%.
Las importaciones cayeron un 3,9% respecto al año anterior, reflejando una demanda débil por parte de industrias y consumidores.
Las exportaciones superaron a las importaciones, de modo que el superávit comercial de China ascendió a 97.400 millones de dólares.
El reporte llegó al día siguiente de que Pekín prometiera flexibilizar la política monetaria y proporcionar más apoyo a la segunda economía más grande del mundo.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha amenazado con imponer aranceles del 60% o más a las importaciones de productos chinos, complicando los esfuerzos de Beijing al amenazar un área de la economía que ha tenido un desempeño relativamente bueno mientras el sector inmobiliario se estanca y el gasto del consumidor sigue siendo frágil.
Algunos analistas dicen que los últimos contratiempos probablemente sean temporales.
"Esperamos que las exportaciones se aceleren de nuevo en los próximos meses, respaldadas por ganancias en la competitividad de las exportaciones y anticipación de los exportadores a los aranceles", dijo Zichun Huang de Capital Economics en una nota.
"Los volúmenes de importación disminuyeron el mes pasado, pero es probable que se recuperen a corto plazo a medida que el gasto fiscal acelerado impulse la demanda de materias primas industriales", dijo.
Los efectos de los aranceles probablemente no empezarán a notarse hasta mediados de 2025, escribió Huang.
Las exportaciones a Estados Unidos crecieron un 8% en noviembre en comparación con el mismo período del año pasado, mientras que los bienes enviados a la Unión Europea aumentaron un 7,2%.
Sin embargo, los envíos a Rusia cayeron un 2,6% interanual en comparación con octubre, cuando las exportaciones a Rusia aumentaron un 27%. La disminución llega varios meses después de que Estados Unidos impusiera sanciones secundarias a los bienes considerados como apoyo a las operaciones militares de Rusia, lo que afectaba a algunas empresas chinas a las que Estados Unidos acusó de ayudar a Moscú a eludir las sanciones.
En otra señal de demanda débil, la inflación de venta al consumidor en noviembre fue del 0,2%, más baja de lo esperado, según datos publicados el lunes, bajando del 0,3% del mes anterior principalmente debido al descenso en los precios de los alimentos.
Pero a finales del mes pasado, una encuesta oficial del Buró Nacional de Estadísticas mostró que la actividad de las fábricas en China se expandió por segundo mes consecutivo en noviembre, subiendo a 50,3, la cifra más alta reportada en siete meses. Un índice por encima de 50 sugiere crecimiento mientras que por debajo de 50 representa una contracción.
El repunte en los pedidos de fábrica también puede reflejar esfuerzos para adelantarse a aranceles más altos, dijeron los analistas.