BUENOS AIRES (AP) — La inflación en Argentina continúa a ritmo de desaceleración; en octubre fue de 2,7%, la más baja de los últimos tres años.
La cifra difundida el martes por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) se ubica por debajo del 3% mensual, uno de los objetivos que se había planteado el presidente ultraderechista Javier Milei para antes de fin de año.
Tras conocerse el dato, el mandatario reaccionó eufórico en sus redes sociales y felicitó a su ministro de Economía, Luis Caputo. También adelantó que de continuar esta tendencia descendente, en los próximos dos meses bajará de 2% a 1% la devaluación mensual del tipo de cambio oficial.
En septiembre, la inflación había marcado 3,5%. En la comparación interanual, el incremento en octubre alcanzó 193%, menor al 209% del mes pasado.
En tanto que acumula una variación de 107% en el año.
La inflación de octubre es la más baja registrada desde noviembre de 2021, cuando esa cifra alcanzó el 2,53%.
Una de las claves de la medición de octubre ha sido la baja incidencia de los rubros Transporte (1,2%) y Alimentos y bebidas no alcohólicas (1,2%) en el aumento de los precios. En tanto que las mayores alzas se dieron en la división Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (5,4%) por aumentos en alquileres, tarifas de servicios públicos y de la gasolina.
Milei, un economista ultraliberal, ganó la presidencia hace casi un año, en gran medida, al capitalizar el hartazgo social frente a las recetas fallidas para terminar con la inflación que atormenta a los argentinos desde hace casi dos décadas y que ha puesto al país sudamericano al tope de los rankings globales que miden este fenómeno económico.
El mandatario implementó un severo plan de ajuste y luego del 25,5% que marcó en diciembre del año pasado, la inflación inició una trayectoria descendente, con leves repuntes en junio y agosto, coincidentes con aumentos de servicios públicos.
La primera consecuencia de esta política es que la inflación ha dejado de estar al frente de las preocupaciones de la población, superada por la inseguridad y el desempleo.
Eufórico con el dato, Milei adelantó que bajará a 1% el ritmo de devaluación controlada que aplica sobre el mercado oficial de cambios. Esta es una política que lleva el gobierno para que la cotización del dólar en ese segmento no le pierda pisada a su precio en el mercado ilegal, al que recurren la mayoría de los argentinos debido a las restricciones cambiarias que rigen desde 2019.