Juicio y condena a activistas prodemocracia en Hong Kong

Repercusiones del juicio de seguridad nacional en Hong Kong

HONG KONG (AP) — Catorce activistas prodemocracia fueron condenados el jueves en el mayor caso de seguridad nacional en Hong Kong, en una corte que dijo que su plan de conseguir cambios a través de unas primarias no oficiales habría socavado la autoridad del gobierno y creado una crisis constitucional.

Tras un movimiento de protesta en 2019 que llenó de manifestantes las calles de la ciudad, las autoridades prácticamente han silenciado la disidencia en Hong Kong tras reducir las opciones electorales, reprimir a los medios y aprobar una ley de seguridad impuesta por Beijing, según la cual fueron condenados los activistas.

Entre los condenados por conspiración para cometer subversión estaban los exlegisladores Leung Kwok-hung, Lam Cheuk-ting, Helena Wong y Raymond Chan, que podrían enfrentar penas de hasta cadena perpetua en vistas posteriores de sentencia. Los dos acusados absueltos eran los exconcejales de distrito Lee Yue-shun y Lawrence Lau. La fiscalía dijo que apelaría las absoluciones.

Los activistas formaban parte de los 47 defensores de la democracia procesados en 2021 por su participación en las primarias. La fiscalía les acusa de intentar paralizar el gobierno hongkonés y tratar de derrocar al jefe de gobierno de la ciudad consiguiendo la mayoría legislativa necesaria para imponer vetos presupuestarios de forma indiscriminada.

En un resumen del veredicto distribuido a los medios, la corte dijo que los participantes en la votación habían declarado que utilizarían su poder legislativo para vetar los presupuestos.

Según la miniconstitución de la ciudad, el jefe de gobierno puede disolver la legislatura si no se puede aprobar un presupuesto, pero tendría que renunciar si el plan de gasto vuelve a recibir un veto en la siguiente legislatura.

En el veredicto de 319 páginas, los jueces aprobados por el gobierno para dirimir el caso también dijeron que si el plan de vetar propuestas de ley llevaba a la disolución de la legislatura, eso implicaba que "la aplicación de cualquier nueva política del gobierno se vería gravemente obstaculizada y en la práctica paralizada".

"El poder y la autoridad tanto del gobierno como del jefe de gobierno se habrían visto socavados en gran medida", indicó la corte en su veredicto. "En nuestra opinión, eso crearía una crisis constitucional para Hong Kong".

Algunos de los acusados condenados hicieron gestos de despedida a sus familias mientras salían de la corte.

El tribunal absolvió a Lau y Lee tras concluir que no mencionaron vetos al presupuesto en su campaña electoral.

Observadores externos señalaron que el proceso era un ejemplo de cómo se utiliza la ley de seguridad para aplastar la oposición política tras las enormes protestas contra el gobierno de 2019. También mostraba cómo se ha ido desvaneciendo la promesa de Beijing de mantener las libertades civiles de estilo occidental durante 50 años en la excolonia británica, formulada cuando se devolvió a China en 1997.

Sin embargo, los gobiernos de Beijing y Hong Kong insisten en que la norma ha ayudado a recuperar la estabilidad en la ciudad y que la independencia judicial está protegida. Tras los veredictos, Beijing expresó su apoyo a la labor de las fuerzas de seguridad y judiciales de la ciudad, pese a las preocupaciones occidentales.