BUENOS AIRES.- En un tono provocador, el mandatario argentino Javier Milei redobló el lunes la apuesta en su áspero diferendo con el gobierno español mientras sus funcionarios sostuvieron que el dirigente ultraderechista no pedirá disculpas por sus polémicas críticas al primer ministro Pedro Sánchez y a su esposa.
Tras su llegada a Argentina desde Madrid, donde cuestionó a Sánchez y tachó a su esposa Begoña Gómez de corrupta —reavivando así la tormenta diplomática entre ambos países—, Milei escribió en su cuenta de X, antes Twitter, “¡Hola a todos! Volvió el león, surfeando sobre una ola de lágrimas socialistas”.
Sus dichos provocaron que el gobierno español llamara a consultas a la embajadora de España en Argentina, María Jesús Alonso, y calificara la situación como el momento más grave de las relaciones entre ambos países.
Sánchez, quien ha exigido una rectificación pública a Milei, dijo el lunes que las declaraciones del dirigente de extrema derecha “no estuvieron a la altura” de un jefe de Estado y planteó que la reacción de su gobierno será acorde “a la dignidad que representa la democracia española y a los lazos de hermandad que unen” a los dos países.