BERLÍN (AP) — El año pasado murieron una cifra récord de trabajadores de ayuda en conflictos de todo el mundo y este año va camino de ser aún más letal, según dijo el lunes Naciones Unidas.
La Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios dijo que 280 trabajadores humanitarios murieron en 33 países en 2023, más del doble que la cifra de 118 del año anterior. Más de la mitad de las muertes del año pasado se registraron en los tres primeros meses de la guerra entre Israel y Hamás que comenzó en octubre, la mayoría en ataques aéreos.
La oficina dijo que este año "puede ir camino de un resultado aún más letal", con 172 trabajadores humanitarios asesinados para el 7 de agosto.
Por ahora han muerto más de 280 cooperantes en Gaza, la mayoría de la agencia de la ONU para refugiados palestinos, UNRWA, según la OCHA. Los "niveles extremos de violencia en Sudán y Sudán del Sur" también han contribuido a la cifra de muertos de este año y el pasado.
La coordinadora en funciones de ayuda de emergencia de Naciones Unidas, Joyce Msuya, dijo en un comunicado que "la normalización de la violencia contra trabajadores humanitarios y la ausencia de rendición de cuentas es inaceptable, inadmisible y enormemente dañina para las operaciones humanitarias en todas partes".
Msuya reclamó en un comunicado que "las personas en el poder actúen para poner fin a las violaciones contra civiles y a la impunidad con la que se cometen estos actos atroces".