Piden renuncia de jefes de Defensa y Policía de Sri Lanka tras atentados

El presidente de Sri Lanka, Maithripala Sirisena, pidió hoy al ministro de Defensa y al jefe de la Policía su renuncia tras los atentados del domingo pasado contra iglesias, hoteles de lujo y zonas residenciales que hasta ahora han dejado al menos 359 muertos y más de 500 heridos.

Poco antes, Sirisena había anunciado que reemplazaría a los jefes de los servicios de seguridad y del departamento de policía en un plazo de 24 horas, según el diario de Sri Lanka The Daily Mirror.

Sirisena indicó que tomará medidas severas contra aquellos que no actuaron sobre las advertencias de los agentes de Inteligencia de India sobre posibles ataques contra iglesias cristianas, así como contra otras partes del país y la embajada india en Colombo.

La petición del mandatario tiene lugar después que conocerse que los servicios de inteligencia de Sri Lanka fueron alertados por sus colegas de India sobre ataques por parte de militantes islámicos, “dos horas antes” del primer atentado en Colombo.

Explicó que la advertencia de las agencias de Inteligencia de India no la recibió por parte de los altos cargos pertinentes. “Si lo hubieran hecho, habría actuado de forma inmediata", subrayó Sirisena, al justificar su decisión de tomar medidas estrictas contra quienes fallaron en su deber.

El domingo anterior, tres iglesias en las ciudades de Batticaloa, Negombo y Colombo, así los hoteles capitalinos El Shangri-La, Kingsbury y Cinnamon Grand, además un zoológico y una zona residencial de la capital cingalesa fueron atacados por suicidas, causando hasta ahora al menos 359 muertos y más de 500 heridos.

Las investigaciones preliminares sugieren que fueron atentados suicidas, obra de un grupo islamista National Thowheeth Jamaath (NTJ), sin embargo, el grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó los ataques, que tuvieron como objetivo los ciudadanos de los países de la coalición internacional dirigida por Estados Unidos.

Según el ministro de Defensa de Sri Lanka, Ruwan Wijewardene, la mayoría de los atacantes suicidas cursaron estudios en el extranjero, en Reino Unido y Australia, ya que provenían de clase media alta y por tanto eran bastante independientes económicamente.