PUERTO PRÍNCIPE, Haití (AP) — El presidente de Kenia, William Ruto, llegó el sábado a Haití y aseguró que debido a la presencia de las fuerzas policiales kenianas que combaten a las pandillas, "la seguridad del país ha mejorado significativamente".
Un experto en seguridad de Naciones Unidas contradijo las declaraciones de Ruto, al advertir apenas unos días atrás que la violencia en el país empeoraba a medida que las pandillas aumentaban su control sobre la nación caribeña.
Ruto bajó del avión y pasó revista a oficiales armados en un pequeño trozo de alfombra roja flanqueada por otros oficiales. Se dirigió a una base keniana en el aeropuerto, donde se reunió con los policías que combaten a las pandillas y con varios funcionarios de alto rango de Haití y Canadá.
"Han representado al pueblo de Kenia con valor, profesionalismo, solidaridad, compasión y eficacia", dijo Ruto a los agentes que lo rodeaban en el estrado.
Aseguró que las fuerzas kenianas han reforzado la infraestructura de seguridad y permitido que los haitianos desplazados regresen a sus hogares después de huir de la violencia. Sin embargo, muchos haitianos aseguran que la violencia sigue siendo igual o peor de mala que antes de la llegada de las fuerzas kenianas en junio pasado.
Ruto dijo que esperaba poder escuchar a algunos de los integrantes de las fuerzas kenianas y escuchar sobre su progreso antes de viajar a Nueva York para una reunión con dirigentes de Naciones Unidas, mientras se busca encontrar la mejor manera de brindar apoyo y recursos adicionales a las fuerzas kenianas y jamaicanas que han tenido problemas para contener a las pandillas que aterrorizan a la nación caribeña.
Kenia fue la primera nación en enviar fuerzas como parte de un esfuerzo más amplio de la ONU para dar apoyo internacional a Haití, que se sumió en un conflicto y una crisis política tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse, ocurrido en 2021.
Unos 400 agentes de la policía keniana se encuentran en Haití. A principios de este mes, más de una veintena de policías y soldados de Jamaica llegaron al país. Pero Estados Unidos y otros países han dicho que las fuerzas no son suficientes y carecen de recursos para enfrentar a las pandillas, que controlan cerca de 80% de la capital Puerto Príncipe.
Mientras tanto, el experto en derechos humanos de la ONU William O'Neill, quien visitó Haití esta semana, advirtió el viernes que la violencia de pandillas está propagándose en Haití, y que la Policía Nacional de ese país todavía carece de la "capacidad logística y técnica" para combatir a las pandillas, que siguen invadiendo nuevos territorios.
"Las consecuencias humanitarias son dramáticas", dijo al advertir sobre una inflación desbordada, escasez de productos básicos y "personas desplazadas interna y externamente que incrementan todavía más la vulnerabilidad de la población, en especial mujeres y niños".
Se tiene previsto que la misión alcance un total de 2.500 efectivos, y Bahamas, Bangladesh, Barbados, Benín y Chad se han comprometido a enviar policías y soldados, aunque no se sabe cuándo ocurrirá.
Si bien Estados Unidos dejado entrever la posibilidad de crear una fuerza de pacificación de la ONU, dicha idea resultaría exagerada y controvertida debido a la introducción del cólera y los casos de abuso sexual que ocurrieron la última vez que las tropas de la ONU estuvieron en Haití.
La visita de Ruto también se produce días después de que Haití creó un consejo electoral provisional, largamente buscado por la comunidad internacional, para facilitar su primera elección general desde 2016.
En el vacío de poder dejado por el asesinato de Moïse, el dominio de las pandillas ha crecido cada vez más. Muchas personas esperan que una elección general también ayude a restaurar el orden en Haití, junto con la misión de paz.