Sofía, Bulgaria.- Varias ONG y partidos han expresado su firme oposición a la enmienda aprobada el miércoles por el Parlamento de Bulgaria que prohíbe la "propaganda" relacionada con el colectivo LGBT+ en las escuelas y que, a su juicio, supone una grave vulneración del derecho comunitario.
La enmienda a la Ley de Educación, propuesta por el partido ultranacionalista y prorruso "Resurrección", fue aprobada en doble votación por amplia mayoría.
Además de los diputados ultranacionalistas, la enmienda contó con el respaldo del Partido Socialista Búlgaro, que es socialmente conservador y contrario a lo que define como "ideología de género", así como de los conservadores del GERB, que forma parte del Partido Popular Europeo.
En contra votaron los liberales reformistas del PP-DB, el partido de la minoría turca y algunos diputadoxxs del GERB, que criticaron la decisión de la dirección de su formación.
La ley prohíbe "la propaganda, promoción o incitación de cualquier forma, directa o indirectamente, en el sistema educativo de ideas y puntos de vista relacionados con la orientación sexual no tradicional y/o la identidad de género distinta a la biológica". La aprobación de esta enmienda, similar a normas adoptadas en Rusia y Hungría, ha generado una oleada de críticas, y también se produjo una pequeña protesta en el centro de Sofía.
Elisaveta Belobradova, diputada del reformista PP-DB, calificó la medida como "populismo barato".
Denitsa Lyubenova, abogada de la ONG Deystvie, indicó que la ley "presagia implícitamente una caza de brujas y sanciona cualquier esfuerzo educativo relacionado con personas LGBT+ en las escuelas".