Acuerdo frontera entre Ucrania y Polonia tras protestas

Competencia desleal, exportaciones y relaciones bilaterales

Cracovia (Polonia), 29 abr (EFE).- El último punto fronterizo entre Ucrania y Polonia que permanecía cerrado al tráfico de camiones dejó de estar bloqueado este lunes, con lo que concluyen, al menos por el momento, las protestas de los agricultores polacos que han tenido lugar desde hace meses.

El cruce de Rava-Ruska, el último que aún se mantenía ocupado por piquetes polacos, quedó liberado al tráfico en la mañana de hoy, como confirmó un portavoz de la Guardia Fronteriza polaca.

Según declaró a la agencia polaca PAP Roman Kondrów, presidente de una organización regional de agricultores de la región fronteriza con Ucrania de Subcarpacia (este), la protesta ha quedado suspendida tras una reunión con el ministro polaco de Agricultura, Czeslaw Siekierski, el pasado sábado.

No obstante, advirtió, los bloqueos podrían reanudarse si el Gobierno no cumple sus demandas.

El ministro de Agricultura ucraniano en funciones, Mikola Solski, afirmó que la apertura de la frontera es "resultado de unas negociaciones que no han sido fáciles" y que "continuarán en el futuro".

Según un comunicado del Ministerio ucraniano de Agricultura, el 7 de mayo se celebrará otra reunión de las partes polaca y ucraniana "para discutir las condiciones de cooperación para este verano".

El sábado se celebró en Varsovia una ronda de consultas intergubernamentales polaco-ucranianas en las que se abordó, entre otros temas, el comercio entre ambos países, y que culminó con la firma de una declaración conjunta para mejorar las relaciones bilaterales.

Fuentes del Gobierno de Ucrania aseguran que el volumen de mercancías ucranianas exportadas a través de Polonia ha aumentado un 20 % con respecto a hace unos días.

Desde hace más de seis meses, los polacos han impuesto de manera intermitente bloqueos al tráfico de mercancías agroalimentarias provenientes de Ucrania para protestar por lo que consideran como competencia desleal de sus vecinos y contra las exportaciones incontroladas de cereales y alimentos ucranianos.

El conflicto, que provocó un empeoramiento en las relaciones entre Varsovia y Kiev y cruces de descalificaciones entre ambos gobiernos, tiene su origen en las medidas excepcionales aprobadas por Bruselas para permitir la entrada, sin cupos ni controles de calidad, de productos agroalimentarios de Ucrania en la Unión Europea (UE).

Además, los productores polacos exigen la retirada del llamado Pacto Verde y de sus exigencias para el sector agrícola y el fin de las importaciones ucranianas a la Unión Europea.