BOGOTÁ (AP) — El exjefe paramilitar Salvatore Mancuso, quien fue uno de los protagonistas del conflicto armado en Colombia, salió el miércoles de una cárcel de Bogotá luego de meses de pedir su libertad a los tribunales con la promesa de colaborar en los acercamientos del gobierno con grupos armados ilegales, informó el instituto penitenciario colombiano.
Mancuso, quien estuvo recluido en Colombia desde febrero, recuperó su libertad luego de comparecer ante varios tribunales en Colombia y que los mismos notificaran al Instituto Penitenciario que ya no tiene órdenes para ser privado de la libertad tras ser acusado de miles de delitos, la mayoría cometidos cuando comandaba las extintas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
El exparamilitar fue deportado a Colombia el 27 de febrero proveniente de Estados Unidos, donde se declaró culpable y fue sentenciado a más de 15 años de prisión por haber dirigido la fabricación y el envío de más de 100.000 kilogramos de cocaína. En 2020 cumplió su pena en ese país.
Poco antes de su excarcelación, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) detalló en un comunicado que Mancuso saldría en libertad luego de remitir 31 documentos a despachos judiciales para revisar su expediente y descartar medidas de aseguramiento.
"Luego de surtido el trámite administrativo, el Inpec... emitió el concepto de viabilidad que le otorga la libertad a Salvatore Mancuso", agregó el comunicado.
El instituto señaló que le solicitó a la Unidad Nacional de Protección —encargada de proteger a personas amenazadas o en riesgo— realizar gestiones para garantizar su seguridad.
El caso de Mancuso es peculiar para la justicia en Colombia debido a que comparece ante dos tribunales especiales: el de Justicia y Paz, creado para los paramilitares que dejaron las armas a inicios de 2005, y la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) que juzga a los miembros de la extinta guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y a militares o civiles que cometieron crímenes en más de cinco décadas del conflicto armado interno.
Se espera que al salir de la cárcel Mancuso ejerza como "gestor de paz" y colabore en los acercamientos del gobierno con grupos armados luego de ser designado como tal por el presidente Gustavo Petro.
No está claro en qué negociaciones participaría Mancuso. Sin embargo, Petro abrió la puerta para dialogar con el Clan del Golfo, de herencia paramilitar y el mayor cártel de narcotráfico activo.
Mancuso ha prometido que revelará detalles del conflicto armado. En versiones reservadas ante la JEP, ha nombrado a más de 300 personas, entre las que hay exfuncionarios estatales y exmandatarios como Álvaro Uribe Vélez (2002-2010), a quien Mancuso señaló de haber conocido como gobernador de Antioquia (1995-1997) sobre una masacre. Uribe ha negado esas afirmaciones.
Como comandante paramilitar, acumuló miles de crímenes por los que siguió respondiendo desde que dejó las armas, entre los que hay cruentas masacres como las de El Aro y La Granja en las que mataron a decenas de personas acusándolas de apoyar o pertenecer a guerrillas.