EL CAIRO (AP) — La tormenta Daniel provocó inundaciones devastadoras en el este de Libia que reventaron embalses y arrasaron vecindarios de varias localidades a orillas del Mediterráneo. Se teme que haya hasta 2 mil muertos, dijo uno de sus gobernantes el lunes.
La destrucción parecía ser de mayor magnitud en Derna, una ciudad que estuvo bajo control de extremistas islámicos durante el caos en que se ha sumido Libia por más de una década y que la ha dejado con infraestructura ruinosa e inadecuada. El país sigue dividido entre dos gobiernos rivales, uno en el este y otro en el oeste, cada uno de ellos con el respaldo de grupos armados y gobiernos extranjeros.
El número confirmado de muertos por las inundaciones del fin de semana seguía siendo de 61 hasta el lunes por la noche, según las autoridades sanitarias. Pero el recuento no incluyó a Derna, la cual quedó inaccesible, y se cree que muchos de los desaparecidos en el lugar fueron arrastrados por las aguas después de que dos represas reventaron río arriba.
Videos captados por los residentes de Derna publicados en línea mostraban gran devastación. Áreas residenciales enteras fueron arrasadas a lo largo de Wadi Derna, un río que baja desde las montañas y pasa por el centro de la ciudad. Edificios de apartamentos de varios pisos que alguna vez estuvieron muy alejados del río se derrumbaron parcialmente en el barro.
En una entrevista telefónica con la televisora Al Masar el lunes, el primer ministro Ossama Hamad del gobierno del oriente de Libia indicó que se teme que haya 2.000 muertos en Derna y que miles de personas más hayan desaparecido. Dijo que la ciudad ha sido declarada zona de desastre.
Ahmed al Mosmari, portavoz de las fuerzas armadas del país en el este, dijo en conferencia de prensa que el número de muertos en Derna ha rebasado los 2.000 y que se reportaron entre 5.000 y 6.000 personas desaparecidas. El portavoz atribuyó la catástrofe a la ruptura de dos represas cercanas, que desataron una inundación súbita y letal.
Desde un alzamiento popular en 2011 que derrocó al gobernante Muammar Gadafi y que derivó en su asesinato, Libia no ha tenido un gobierno central, y a consecuencia de la anarquía se ha reducido la inversión en los caminos y servicios públicos del país, y las regulaciones para las construcciones privadas son mínimas.
Derna, junto con la ciudad de Sirte, estuvieron bajo control de grupos extremistas durante años, y en cierto momento por organizaciones fieles al grupo Estado Islámico, hasta que fuerzas leales al gobierno del este del país las expulsaron en 2018.
En la ciudad oriental de Bayda se informó de la muerte de por lo menos 46 personas, dijo Abdel Rahim Mazek, director del principal centro médico de la ciudad. Se reportaron otros siete muertos en la localidad costera de Susa, en el noreste de Libia, de acuerdo con la Autoridad de Emergencias y Ambulancias. Otras siete personas fueron reportadas muertas en las ciudades de Shahatt y Omar al Mokhtar, dijo el ministro de Salud Ossama Abduljaleel. También se informó de un deceso el domingo en la localidad de Marj.
La Media Luna Roja de Libia informó que tres de sus trabajadores murieron mientras ayudaban a familias en Derna. Previamente, el grupo indicó que había perdido el contacto con uno de sus trabajadores cuando intentaba ayudar a una familia atrapada en Bayda. Se han reportado docenas de desapariciones, y las autoridades temen que las personas sin localizar hayan muerto en las inundaciones que destruyeron viviendas y otras propiedades en varias localidades del este de Libia, según medios locales.